La alcaldesa de Bogotá, Claudia López, anunció a través de su cuenta oficial en Twitter que había entrado en comunicaciones con altos mandos del Ejército nacional con la petición de que la ayuden a proteger a la población carcelaria que hoy habita en URI y estaciones de policía.
La decisión de solicitar refuerzos para proteger la integridad de esta población tuvo lugar a partir de los acontecimientos de las últimas horas, en los cuales hubo intentos de quemar vivos a 15 uniformados dentro de su puesto de trabajo, más las heridas con arma blanca y de fuego que ellos han recibido al tratar de resistirse a los ataques.
Con la medida se garantizarán las vidas de 2.825 personas privadas de la libertad y que ahora están en riesgo de recibir un ataque similar por parte de quienes están causando desmanes en la ciudad.
Eso sí, la alcaldesa asegura que no se trata de una militarización propiamente dicha. El refuerzo de la Fuerza Pública sería para garantizar las vidas de los detenidos, pero no se extiende hacia absolutamente todos los terrenos de la ciudad.