La alcaldesa Claudia López se reunió con el Comité Epidemiológico Nacional este lunes 10 de mayo y cambió las restricciones que aplican actualmente para la ciudad. Las medidas aplicarán desde mañana 11 de mayo y tienen que ver con el toque de queda y la ley seca.
Entre las medidas acordadas están: “cerrar todo establecimiento a las 10:00 p.m., ley seca de 10:00 p.m. a 4:00 a.m., toque de queda general de 11:00 p.m. a 4:00 a.m., y autorizar el retorno educativo en las condiciones de aforo y bioseguridad previamente establecidas”, dijo la alcaldesa a través de su cuenta de Twitter.
La ciudad sigue en alerta roja y tiene un nivel de ocupación de camas UCI del 94,8% por Covid-19, según Saludata.
A las 4:00 de la tarde la alcaldesa Claudia López explicó cómo está la situación en la capital actual. Por un lado, está la tercera ola de Covid-19 y al mismo tiempo la crisis social y humanitaria que vive Bogotá por el Paro Nacional.
“Hoy vamos a cerrar al 96% de UCI Covid. Es decir, realmente estamos al borde del colapso hospitalario”, dijo la alcaldesa. El tercer pico habría terminado esta semana, según los epidemiólogos, pero ante las constantes aglomeraciones por las manifestaciones el pico durará dos semanas más.
La alcaldesa recordó que Bogotá nunca había llegado al 96% de ocupación UCI. “La diferencia es que antes teníamos el 94% de 1.843 camas y ahora son 2.631. No importa cuántas camas pongamos, sigue creciendo y creciendo la ocupación”, confirmó la mandataria.
Lo cierto es que Claudia López fue enfática que esta situación tendría solución. “La medida que más nos protegería es que haya una mesa de concertación política con los convocantes del paro y los manifestantes que están en la calle”, afirmó la alcaldesa; sin embargo, por lo que se conoce esa reunión no llegó a ningún acuerdo. "Nos están condenando a la muerte", agregó.
“Durante 15 meses Bogotá pudo salir adelante porque tuvo un pacto de cuidado”, enfatizó López. Eso quiere decir que, por el compromiso social de la ciudadanía, todos se estaban cuidando del Covid-19. “Es un pacto que está roto hace dos semanas y nos arriesgamos al peligro de muerte masiva”, agregó.
Con respecto a las medidas que iba a ampliar, la alcaldesa dijo que quisiera hacer más pero ante la crisis social estas son las únicas restricciones que podrían funcionar: el toque de queda, la ley seca a excepción del expendio de bebidas embriagantes por domicilio y el regreso a clases en los colegios.
El modelo de alternancia no es obligatorio. “Queremos dejar esa puerta abierta, eso lo decidirán los padres y los colegios”, explicó la mandataria pues los niños llevan 15 meses esperando volver a los colegios ante la crisis de la pandemia.
Por último, Claudia López resaltó que si no hay esfuerzo de cuidado el sistema hospitalario va a colapsar como pasó en Medellín. “Yo le ruego a todos los ciudadanos un poquito de responsabilidad con nosotros y nuestras familias”, concluyó.
