El caso de la mujer que fue asesinada en un motel en la localidad de Barrios Unidos causó conmoción en los bogotanos. Recientemente, han surgido nuevos detalles y testimonios que podrían ayudar a las investigaciones.
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Cabe recordar que los hechos ocurrieron el pasado lunes 1 de mayo en el Motel Jardín Real, ubicado en la localidad de Barrios Unidos. Allí, en horas de la tarde llegó la pareja para toma un servicio común y corriente, aunque todo terminó en una tragedia.
El presunto asesino, minutos después de haberse alojado en la habitación, llamó a la recepcionista para confesarle que había a atacado a su pareja con un arma cortopunzante, por lo que la mujer procedió a alertar a las autoridades para que capturaran al sujeto.
La Policía acudió al lugar de los hechos y encontró a la víctima, identificada como Sandra Milena Saavedra Ballén -de 46 años de edad- muerta, debido a ocho heridas con arma blanca.
La mujer estaba tendida en el suelo desnuda envuelta en unas sábanas cubiertas de sangre. El presunto asesino tenía algunas heridas leves, por lo que fue trasladado al Hospital Infantil Universitario de San José
¿Quién es el victimario?
El hombre fue identificado como Juan Miguel Pinzón y aceptó haber cometido el crimen, por lo que fue capturado y se adelantan investigaciones en su contra.
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Hasta el momento se sabe que el sujeto cuenta con antecedentes penales pro violencia intrafamiliar, estafa, tráfico, fabricación, porte de estupefacientes y hurto calificado.
Los nuevos detalles
En cuanto al presunto victimario, la unidad investigativa del medio 'El Tiempo' reveló que es dueño de un establecimiento de comidas rápidas, ubicado en el barrio Villa Luz, que abrió en octubre de 2018.
Pinzón permanece en el Hospital Infantil Universitario de San José recuperándose de graves heridas, de 8 a 10 centímetros, que presentó en sus piernas.
Sobre el crimen, los más recientes informes estipularían que la víctima habría sido agredida en sus muñecas, cuello, ojos y tobillos.
Además, aparentemente, el crimen habría sido cometido alrededor de las 5 de la tarde, pero solo hasta las 9: 30 de la noche fue cuando el presunto asesino confesó sus acciones a la recepcionista del lugar.