
El Día Mundial del Sueño se celebra el tercer viernes del mes de marzo. En esta versión el lema es "duerme bien, envejece sano" y no es para menos, debido a que los problemas a la hora de dormir se han convertido en una epidemia global.
Según la Organización Mundial de la Salud los trastornos del sueño se han estipulado como una preocupación para las entidades de salubridad porque estas molestias pueden desembocar en enfermedades neurológicas o cardiovasculares.
Las cifras arrojan que un total de 200 millones de personas padecen molestias en las noches antes de descansar. Dormir es una necesidad biológica del ser humano y cuando se convierte en una cuestión frecuente se someten a costosos tratamientos para solventar dicha situación.
“Es fundamental establecer hábitos saludables, preservar los estados de luz y oscuridad para mantener el ciclo sueño-vigilia, evitar el uso de pantallas a altas horas de la noche, no pasar demasiado tiempo en cama y realizar rituales de relajación, son elementos esenciales para el adecuado tratamiento de los problemas del sueño”, señala Edgar Osuna, médico especialista en temas de sueño."Pasar la noche en blanco", puede llevar a lapsos de estrés, ausentismo laboral, accidentes de tránsito o patologías relacionadas con la afectación de algún órgano vital. El sueño no solo está relacionado solo con recomponer la energía gastada sino que estas horas el cuerpo regula todas las sustancias químicas de los órganos para que estos funcionen de buena manera. Por ello no dormir representa un grave riesgo de salud. Una persona debe reposar al rededor de ocho horas diarias para que el organismo se recomponga de todas las energías utilizadas. Sin embargo, los bebés deben dormir de 14 a 17 horas, mientras que la población de la tercera edad suele dormir menos de siete horas. Los trastornos del sueño se presentan con más frecuencia en las mujeres y en los habitantes mayores a 60 años. Según investigaciones internacionales los individuos que llegan a desarrollar altos niveles de angustia, depresión o irá, están directamente relacionados con enfermedades del sueño. En las fases pertinentes al descaso interviene la relajación muscular, la desaceleración en los latidos del corazón y la reducción del metabolismo. ¿Cómo lograr un sueño profundo?
- No comer en exceso previo a conciliar el descanso en la noche
- Es recomendable hacer una rutina de ejercicio antes de acostarse
- Alejar los dispositivos eléctricos para que así las radiaciones no interrumpan el sueño
- Establecer una hora de dormir con el fin de acostumbrar al organismo