Las autoridades incautaron un celular junto con su manos libres que pretendía ser ingresado a la cárcel de Cómbita, Boyacá. Lo que sorprende es el mecanismo por el que los delincuentes querían ingresar los elementos al penal: con una paloma mensajera.
El Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) informó que gracias al trabajo del Cuerpo de Custodia y Vigilancia del establecimiento de Cómbita en Boyacá, se logró evitar el ingreso de la paloma mensajera con elementos prohibidos al interior de la cárcel.
En imágenes se observa la manera en que los delincuentes amarraron el celular y manos libres al lomo de la paloma mensajera. Las personas que pretendían ingresar los elementos a la cárcel de Cómbita, ubicaron los objetos sobre la paloma haciendo uso de plástico y lo que parece una media del color del ave.
Así mimos, explicó que estas nuevas modalidades de ingreso de elementos prohibidos a la cárcel, se dan como resultado del incremento en los controles de seguridad en los establecimientos y el compromiso de la Dirección del Inpec, para de manera conjunta con el Gaula de la Policía Nacional, combatir la extorsión desde los centros de reclusión.
Las autoridades señalaron que entre las nuevas modalidades para ingresar cosas a las cárceles no solo están las palomas mensajeras sino también el uso de drones.
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"Desde La dirección General del Inpec ya se impartieron instrucciones a todos los establecimientos del país, para crear estrategias que permitan fortalecer los controles perimetrales de las cárceles y evitar el ingreso de elementos prohibidos a través de Drones, animales y el bombardeo desde los barrios aledaños. Modalidades que están tomando fuerza y que ya se están combatiendo por parte de las autoridades penitenciarias", señaló la institución en un comunicado.
Palomas mensajeras en la cárcel de Cómbita
Esta no es la primera vez que se registra una situación de este tipo en la cárcel de Cómbita, Boyacá. Desde el año 2016, guardianes del penal han denunciado que los internos hacen uso de los animales para ingresar celulares, sim cards, drogas, entre otros elementos.
De acuerdo con testimonios de los guardianes en esa época, los reclusos crían a las aves dentro del penal, las alimentan desde la ventanas de la cárcel y cuando hay visita en el penal se llevan a las palomas.
Desde el exterior de la cárcel los visitantes amarran los elementos al lomo de las palomas y como ellas están acostumbradas a ir por alimento al penal, ingresan normalmente solo que con una carga prohibida.
