'Todos podemos crear nuestra propia percepción y solamente tenemos que persistir y tener empeño en ello", agregó uno de los cíborgs al inicio de la conferencia que tuvo lugar la noche del 17 de agosto en el Polideportivo de la Universidad Pontificia Bolivariana, en Medellín.
La charla que duró varias horas tuvo como invitados a tres cíborgs reconocidos por un gobierno, quienes compartieron experiencias y explicaron su intención de profundizar los sentidos mediante el uso de la cibernética; no como objeto tecnológico sino como instrumento adherido al cuerpo humano.
Los cíborgs activistas que se presentaron ante una orda de curiosos fueron Moon Ribas, Neil Harbisson y Manel Muñoz, quienes desde la Cyborg Foundation, fundada a principios del 2010 y la Transspecies Society, desarrollan, incentivan y defienden sus proyectos investigativos, que tal como lo explicaron, "vinculan los sentidos y las percepciones un paso más allá de la cotidianidad."
"La barrera que muchos tienen de ampliar su concepción es el miedo. Lo importante es tener curiosidad."En la actualidad, los cíborgs declararon que viven como humanos pero que no se siente como uno en su totalidad, “somos la primera generación que puede decidir qué órganos y qué sentidos quiere tener”, son una 'transespecie' que incorpora en sus cuerpos diseños tecnológicos para percibir movimientos de tierra, cambios atmosféricos y diferencias cromáticas. La presentación se realizó con el apoyo de la Alcaldía Mayor de Medellín y la Escuela de verano: Hiperrealidades, y entra a formar parte de los múltiples debates sobre la diversidad de percepciones y experiencia de la tecnología en lo humano.
Conectarnos con el entorno
El cíborg Manel Muñoz, fotógrafo barcelonés tiene instalado en su cuerpo un órgano sensorial cibernético para percibir la presión atmosférica del lugar en donde se encuentre, resaltó que actualmente " la tecnología que usamos como herramienta puede convertirse en una extensión que nos conecte con el entorno." Más allá de percibir los olores, los colores, los gustos y el tacto se busca el sentido del equilibrio, de la profundidad visual, de la calidad del aire, de los rayos cósmicos para incorporar sonidos del espacio en composiciones artísticas, entre otros propuestos por ingenieros electrónicos, médicos, artistas, diseñadores de productos y filósofos en el laboratorio de nuevos sentidos. Contó en medio de los inquietantes y asombrados espectadores, que trabaja en la experiencia y precisión de escuchar el tiempo, "esto lo voy a hacer cogiendo los cualidades del sonido; la temperatura va según el tono que yo perciba, el volumen va estar determinado por la presión que haya en el ambiente y el timbre va estar determinado por la humedad." Según Manel, este descubrimiento le permitirá determinar el cambio climático a través de los años, "el diciembre de hace tres años sonaba más grave a el de este año" , exclamó el cíborg en una de las conclusiones a su intervención.El renacimiento de la especie
Para Neil Harbisson, explorador del rol activo de la evolución, es necesario "el renacimiento de nuestra especie" para ampliar nuestras posibilidades de vida en la tierra como en el espacio, lo que implicaría convertir al ser humano en tecnología en vez de usarla o llevarla. El cíborg no conocía los colores, vivía en escala de grises y ahorraba unos cuantos pesos en las fotocopias a blanco y negro. Sin embargo, aseguró que no podía ignorarlos, pues se le aparecían en objetos como las "páginas amarillas, la pantera rosa o el greenpix"."El color y el sonido tienen algo en común, son una secuencia, una es visible y una sonora."Harbisson, por la antena que lleva en su cráneo no puede conseguir sombreros, pero percibe, mediante una vibración que recibe en su cerebro, los colores dominantes. En el 2007 incorporó los infrarrojos y ultravioletas, además incluyó la conexión a internet que le permite captar colores fuera de su cuerpo.
"Si un amigo desde Australia me quiere enviar los colores de una puesta de sol desde su móvil, yo estaré aquí, pero lo estaré recibiendo."El británico escucha música y ve colores y cuando ve colores de obras reconocidas a lo largo de la humanidad, las escucha tal como sus autores las retrataron.
El arte de los sentidos
La última cíborg, pero no menos interesante, se conecta con el sol y sabe cuando está más caliente de lo normal. Se trata de Moon Ribas, artista española que se implantó un sensor sísmico en su cuerpo."Nosotros no nos sentimos ni súper humanos, ni superhéroes. Sino al contrario, somos una alternativa, otra manera de percibir la realidad que ya existe."El arte y los sentidos siempre han determinado momentos definitivos de la humanidad, en este caso, Ribas invitó a admirar a las otras especies e intentar percibir su realidad.