La Embajada de Estados Unidos en Israel cambió brevemente el nombre de su cuenta de Twitter para incluir Cisjordania y Gaza, lo que provocó especulaciones en las redes sociales por parte de muchos que se preguntaron si representaba un cambio de política en el primer día en el cargo del presidente Joe Biden.
Aunque el nombre no fue cambiado en el sitio web de la embajada, la cuenta @USAmbIsrael cambió a "Embajador de Estados Unidos en Israel, Cisjordania y Gaza" alrededor de las 19:00 horas de Israel (mediodía en EEUU), cuando Biden se juramentó como presidente y David Friedman, embajador designado por el ex presidente Donald Trump, renunció oficialmente al cargo.
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Poco tiempo después, la cuenta volvió a ser "Embajador de Estados Unidos en Israel" y un portavoz de la embajada dijo que los cambios "no reflejan un cambio de política o una indicación de un cambio de política futuro. Fue una edición inadvertida", según informó el ente público israelí Kan. No obstante, cuando se enmendó la cuenta, ya se había informado y especulado ampliamente en la prensa israelí.
Los críticos de Biden, como el senador republicano Rick Scott del estado de La Florida, acusaron rápidamente a la nueva administración de mostrar "hostilidad hacia Israel".
"No hay ningún país de Cisjordania o Gaza, solo territorios sobre los que Israel ha estado dispuesto a negociar su soberanía durante décadas, pero que sólo ha recibido hostilidad y terrorismo", tuiteó. Otros comentaristas de derecha y a favor de los colonos afirmaron que el cambio de nombre representaba un cambio de política estadounidense.
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El breve cambio de nombre también enfureció a algunos palestinos, que no quieren que Cisjordania y Gaza estén bajo los mismos auspicios que Israel.
"¿Hemos sido reducidos a Cisjordania y Gaza? ¿Ni siquiera la cortesía de los territorios palestinos ocupados, que está de acuerdo con el derecho internacional?" tuiteó el director ejecutivo del Instituto Palestino de Diplomacia Pública, Salem Barahmeh. "Es una vergüenza para nosotros que esperamos más de esta Administración. Es una vergüenza que permitamos que nuestro proyecto nacional llegue a este punto".
El expresidente Donald Trump, con la ayuda de Friedman, tomó una serie de medidas para normalizar la presencia de Israel en Cisjordania. Sin embargo, no llegó a reconocer oficialmente la soberanía israelí en Cisjordania ni a dar su bendición a la anexión de los asentamientos.
