El 25 de diciembre fue asesinada María Beatriz Correa, de 70 años, en Sabaneta. Su esposo le quitó la vida tras una fuerte discusión.
A Luisa Fernanda Mejía, de 13 años, un joven en Amagá le causó la muerte por negarse a tener relaciones sexuales con él. Ocurrió el 19 de diciembre y tras un intenso operativo de la Policía, el presunto responsable fue capturado un día después.
En Andes, también el 19, Érica Taborda, madre de cinco hijos, murió en un centro asistencial a raíz de las múltiples heridas que le causó su expareja por rechazar volver a tener una relación con él.
Y el 16 de diciembre fue encontrada en Medellín, en una vía pública y envuelta en una funda de colchón y dos pijamas de vehículos, Yésica Paola Tamayo, quien era oriunda de Puerto Berrio y llegó a la capital antioqueña a cumplir una cita. Sus familiares la buscaron por tres días hasta que recibieron la noticia de su deceso.
[single-related post_id="799849"]
Por estos casos y los 57 que han ocurrido durante este año en Antioquia, la Secretaría de las Mujeres manifestó su preocupación por el incremento de los feminicidios en el país y en el departamento e hizo un llamado a la ciudadanía, a las autoridades, a todos para que denuncien y actúen ante cualquier hecho de violencia contra la mujer.
La secretaria de las Mujeres, Luz Imelda Ochoa, en entrevista con Kienyke.com, aseguró que la violencia contra las mujeres es una consecuencia de no tener oportunidades y equidad de género.
"El acto más atroz es el feminicidio, pero viene de una cadena larguísima de discriminación y diferencias entre hombres y mujeres. Hoy los asesinatos no son peores que antes, sin embargo se ven más porque se ha avanzado en equidad de género", dijo la funcionaria a este medio.
[single-related post_id="801046"]
Sin embargo, señaló la funcionaria, desde el gobierno departamental se adelantan acciones puntuales para erradicar esta forma de violencia.
Una de ellas, es la Mesa Departamental que reúne a todos los actores involucrados en esta problemática para tomar medidas que permitan no solo actuar cuando se presentan feminicidios sino, sobre todo, prevenir este flagelo en todos los niveles.
"Tenemos un plan departamental que tiene las rutas que se trabajarán en Antioquia para erradicar la violencia contra las mujeres en los 125 municipios. La meta inicial es tener plan y rutas implementadas en 80 municipios, pero creemos que podemos alcanzar la totalidad", manifestó Ochoa.
También se trabaja articuladamente con los 10 municipios del Valle de Aburrá, en donde se concentran la mayoría de los feminicidios de Antioquia - 53 en lo que va de este año -, en la construcción de un acuerdo metropolitano para frenar la violencia contra la mujer.
De acuerdo con Ochoa, esta política será incluida en el acuerdo de paz y convivencia que ya fue aprobada por la junta del Área Metropolitana y servirá como una herramienta más para evitar nuevos feminicidios y demás agresiones con las que se vulneran los derechos de las mujeres.
"La violencia va a seguir pasando hasta que hombres y mujeres no nos demos cuenta de que la equidad de género es una realidad. Tenemos un rezago grandísimo de paradigmas y mentalidades, pero se debe seguir jalonando la evolución", añadió la secretaria.Urabá, Nordeste, Suroeste y Oriente son algunas de las regiones antioqueñas que tendrán prioridad de intervención en 2018. Sin embargo, para Ochoa, este trabajo debe ir de la mano de los hombres y las mujeres: "No es solo responsabilidad solo del Estado. Se deben tomar decisiones individuales para cambiar la forma como se piensa y como se vive. Es un proceso lento, pero no vamos a parar", dijo. En 2016 fueron asesinadas en Antioquia 126 mujeres y las cifras, por fortuna, van decreciendo. En 2015, fueron 138 casos mientras en 2014 los hechos ascendieron a 179.