Son tiempos difíciles, donde lo inimaginable le ha sucedido al mundo. Cercados por la pandemia del COVID-19, hemos sobrevivido y adaptado tantas dificultades diarias. Por eso, nuestras expectativas se redujeron significativamente y muchos de los paradigmas interiores han sido replanteados.
Sin embargo, el desborde emocional, las adicciones y las enfermedades mentales están a la orden del día, pues desesperadamente se buscan salidas “rápidas” que generen respuestas mágicas al actual vacío existencial.
De esta manera, millones de personas han seguido ingenuamente soluciones de tipo “espiritual”, sin tener en cuenta que, un verdadero proceso interior, en ningún momento se estructura desde la prisa por adquirir la sabiduría instantánea y muchos menos, desde la negación de nuestra propia sombra.
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No es acertado pensar que, por medio de un curso online, un retiro de fin de semana, la lectura de algunos libros de autoayuda o el contacto temporal con ciertos gurús de moda, sea suficiente para alcanzar la iluminación y trascender a otras dimensiones del ser.
La palabra espiritualidad deriva del griego y está compuesta por la voz “espíritus” que significa “respiro”. Por consiguiente, la espiritualidad humana se entiende como la conciencia de una parte de nosotros que no se conoce materialmente, pero que, afecta de diversas maneras al cuerpo, las emociones y la mente. En otras palabras, la espiritualidad es un proceso de aceptación y cultivo de nuestra verdadera esencia.
Ahora bien, para desarrollar la espiritualidad, no podemos empezar de forma idealista. Por el contrario, es fundamental conocer la parte física e instintiva de nuestro cuerpo como una unidad vital, para después, explorar nuestras emociones y sentimientos atravesando muchas noches oscuras del alma. Solo así, es posible conciliarnos de forma integral con la mente y empezar a transitar por el sendero que nos lleve a la conexión con la fuente.
Karen Freve: de la sombra a la luz
Un gran ejemplo de un auténtico proceso hacia el despertar espiritual, es el de nuestra invitada de hoy a la entrevista de la sección “Konciencia” de kienyke.com, la canadiense, Karen Freve. Una linda mujer que nació en un pequeño pueblo, cerca de la ciudad de Quebec en Canadá.
Desde muy pequeña, su mente inquieta cuestionaba la razón de las cosas y los principios de autoridad. Por esta razón, los profesores le pusieron el sobrenombre de: “la rebelde de corazón tierno”.
Más adelante, a los 19 años emprendió un camino interior para descubrirse a sí misma. Viajó por muchos lugares del planeta y se dio cuenta que el mundo no era tan ideal como creía, ya que el dolor de la humanidad y el sufrimiento colectivo eran una realidad.
Años más tarde, logró encajar con gran éxito en la industria de las ventas y en el 2015 se radicó en México. Posteriormente, a finales del 2017, Karen enfermó de una extraña enfermedad, donde los médicos y terapeutas no pudieron ayudarla. A causa de esta grave situación, decidió hacer una inmersión profunda en sí misma con el propósito de encontrar la causa de sus dolencias físicas y emocionales para sanarse.
Renunció a su carrera, se fue a vivir a una comunidad autosostenible en cuyo ambiente, por primera vez a lo largo de su vida, encontró la verdadera felicidad.
Con esta nueva actitud, se curó completamente y descubrió que parte de su misión en la existencia, era ayudar a las personas a salir de la milenaria dualidad entre la naturaleza y las tecnologías, entre el corazón y la mente.
En la actualidad Karen es la cofundadora de “Manifestivals” (www.manifestivals.com) un evento que se realizará el próximo 26 de noviembre de 2021 en Tulum, la bella ciudad amurallada de la cultura Maya, ubicada en el estado de Quintana Roo en México.
Este festival cuenta con la participación de importantes líderes tecnológicos con visiones de corazón, para ayudar a construir un nuevo mundo mucho más compasivo para todos.
La fusión entre software de bienestar interior, el uso consciente de la tecnología y el manejo de la inteligencia espiritual, es una de las muchas puertas que personas como Karen Freve están abriendo hacia la conquista de un nuevo amanecer para la humanidad.