La precandidata a la Gobernación del Magdalena ha venido sumando cuestionables apoyos en su carrera por llegar a ser Gobernadora. Aquí les cuento.
Se calientan las campañas políticas en el departamento del Magdalena y con ella comienzan a revivir no solo los muertos el día de las elecciones, sino aquellos gamonales políticos reconocidos por su cuestionable pasado combinado de sangre, despojos y corrupción, sombras que tanto daño le han hecho a esta zona del país.
Mallath Martínez, desde noviembre de 2022 viene moviendo sus fichas para lograr ser la gobernadora de los magdalenenses, muy a pesar de su aceptable administración como alcaldesa del municipio de Fundación, Magdalena, de donde culminó su periodo de gobierno rodeada de varios escándalos de presunta corrupción (pero esto se los contaré en otro blog).
En ese ajedrez político Martínez continúa sumando apoyos de personajes del oscuro pasado del departamento, esos que contrario a lo que propone Mallath, dejaron sin futuro al Magdalena, y hoy, sin la más mínima vergüenza, posan en fotos como los salvadores de esta tierra que pareciera que fue descubierta para ser saqueada de por vida.
La primera sombra es el condenado parapolítico, Rodrigo Roncallo, esposo de la actual Representante a la Cámara, Kelyn González, quién desde sus propias redes demuestra su apoyo y afinidad por Martínez como la próxima gobernadora del Magdalena.
El nombre de Roncallo volvió a resonar hace poco (no solamente por Mallath), sino porque la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) lo admitió, tras aceptar que llegó a ser congresista gracias al apoyo del Bloque Norte de las Autodefensa Unidas de Colombia, palabras más palabras menos acepto ser otro parapolítico que parió esta tierra del olvido.
Pero los apoyo de exparas hacia Mallath Martínez no paran. Hace pocas semanas, La Silla Vacía reveló la segunda sombra de la precandidata del sol verde (¿Cuál será el concepto para poner el astro de tal color?-Pensado en voz alta-). Se trata de José Barrera, hijo de José María Barrera alias ‘Chepe Barrera’, líder del clan político que maneja los hilos en el municipio de Nueva Granada, Magdalena.
Los Barreras son conocido por su prontuario delictivo, pero además, porque el hombre de camisa naranja que posa con "dignidad" al lado de Martínez, luego de desmovilizarse en 2004, bajo la ley de Justicia y Paz, nunca reparó a las víctimas y tan solo pagó 2 años de cárcel por todo sus delitos, pero aun así como el mismo dice "ando con la cabeza en alto con un par de pecados" (ver video aquí).
La tercera sombra que con orgullo exhibe Mallath Martínez, no es precisamente expara, pero sí una cuestionable exalcaldesa del municipio de Algarrobo, Magdalena, una población condenada a la pobreza y el atraso.
Se trata de Maribel Andrade, que en los últimos meses volvió a ser noticia por contratos plagados de presunta corrupción en el alumbrado público de su pueblo, los cuales según el concejal Jaider Isaza, fueron suscritos con vicios durante la administración de 'La Gorda' (como cariñosamente se le conoce a la exalcaldesa).
Al parecer por dicho contrato los algarroberos viven con varias de sus calles a oscuras, lo que les impide transitar con tranquilidad porque como si se tratara de la época de la colonia sus calles se iluminan con la luz de la luna.
Por tal razón, invito a la precandidata que promete futuro para el Magdalena que le pregunte a la señora Andrade por el contrato de Asepal en Algarrobo, con seguridad tendrá un "ejemplo" en contratación y manejo de recursos públicos.
Y entre sombras continúa Mallath Martínez recorriendo el Magdalena, recogiendo de todo un poco para así sumar los votos que necesita para llegar al Palacio Tayrona, ¿le alcanzará? Esto apenas empieza, lo cierto es que de frente y sin vergüenza demuestra que el fin justifica los medios.