Mario Huertas

Analista de asuntos estratégicos y hemisféricos (Énfasis: Brasil y EE.UU.) Columnista de opinión, diario La Nación. Voluntario internacional para la promoción de nuevos liderazgos, Universal Wonderful Street Academy (UWSA), Jamestown-Accra. Colaborador del Goldstreet Business (Ghana). Profesor de Geopolítica y Geoestrategia. Infante de Marina, Armada República de Colombia (A.R.C).

Mario Huertas

Entre la barbarie y la esperanza

El título de esta entrega tiene origen en esta cita: “El día que salgamos de ese Palacio (de Nariño) definitivamente, ojalá otro Gobierno progresista nos suceda. No estoy participando en las actuales elecciones, estoy hablando de las nacionales. Ojalá se elija un Gobierno progresista que vamos trazando y profundizarla, hoy toda la humanidad se define entre los dos partidos: el de la barbarie y el de la esperanza. Nosotros somos la esperanza de Colombia, no vayan a elegir a la barbarie” (Petro, 27 de septiembre)

Entre la barbarie y la esperanza, son los términos con los cuales Petro definió la elección del próximo domingo 29 de octubre. Y estamos parcialmente acuerdo, solo que no nos dejaremos subvertir la naturaleza de las cosas y tampoco legitimaremos la manipulación del lenguaje. 

De ahí que, en ¿Voto castigo? haya escrito: “he aquí la naturaleza subversiva de la “Administración por sobresaltos”, pues, de acuerdo con Petro, resulta una barbarie no apoyar la combinación de todas las formas de lucha, el terrorismo, el populismo, el desgobierno, el caos, la guerra sucia, la corrupción, la doble moral, la falta de sentido común, el despilfarro, entre otras expresiones políticas que definen perfectamente tanto a Gustavo Petro como a su bloque en el poder”.

Dicho de otra manera, resulta la total inversión de la realidad que el petrismo promueva que la esperanza no puede ser el fortalecimiento de las instituciones y el Estado social de Derecho, la libertad civil, política y económica, el orden democrático y jurídico, el respeto a la autoridad, el buen gobierno y, por supuesto, las buenas maneras. Leal a su pasado, y fiel a su ADN, Petro ha logrado (en ciertos sectores) subvertir el orden de las cosas haciendo pasar lo malo como bueno y lo bueno como malo. 

Las cosas como son. Ni la barbarie es el mundo democrático y liberal que Petro tanto odia y mucho menos la esperanza puede ser el populismo autoritario que tiene su origen en el terrorismo de la lucha armada.

Así que, los comicios del domingo serán una elección de las autoridades regionales y locales mediante las cuales el país nacional puede ejercer “el voto castigo” en contra de la “Administración por sobresaltos” y, a su vez, contra la coalición de partidos que llevaron a Petro a la presidencia y con él, a toda la auténtica barbarie que encarna desde sus tiempos en el M-19 hasta los actuales días de improvisado estadista, fervoroso protector de Primera Línea y adulador de Hamás. 

El voto, como mecanismo civilizado de transar electoralmente las diferencias, es lo totalmente opuesto a la rebelión, sedición o asonada que mediante el uso del terror y la violencia justifica todos los medios para la captura del poder. En este sentido, las democracias pueden corregir por la vía electoral un error y evitar que la equivocación siga arrasando con el país.  

Por lo tanto, los colombianos podrán rectificar el lapsus electoral del año pasado y reencausar el Estado de Derecho que ha sufrido varios golpes por cuenta de los creadores del “estallido social” quienes se han autoproclamado como intelectual y moralmente superiores al resto del país político para hacerse con el ´liderazgo´ la nación a pesar de su pasado, de su escaso talante democrático y su limitadísima capacidad para la gerencia pública. El resultado de administrar por sobresaltos es de sobra reconocido por todo aquel que tenga un mínimo de cultura política y sea honesto intelectualmente. 

Si el sentido común en la política aplica tal como Hernán Echavarría Olózaga lo proclamaba para la economía, el voto castigo será el protagonista de los resultados electorales y prevendrá que la administración pública territorial replique el modelo de gestión sin resultados que se quiere imponer desde la Casa de Nariño.

Creado Por
Mario Huertas
Más KienyKe
La JEP reveló estos nombres en un acto de homenaje a las familias víctimas de este crimen.
Según las autoridades, un hombre llegó hasta la puerta de la institución educativa y comenzó a disparar hacia el patio donde estaban docentes y estudiantes.
El abogado defensor denuncia falta de garantías y pide su libertad inmediata.
El edificio colapsado está en el sector de Campo Alegre, zona de ladera en donde fueron construidas varias urbanizaciones a principios de la década del 2000.
Kien Opina