Lanzarse como candidato una persona que no ha tenido presencia en los medios, habiendo mantenido un perfil bajo a pesar de sus éxitos empresariales, es toda una apuesta. Me refiero, por supuesto, a Santiago Botero, cuyo nombre nos suena, pero más por su homónimo ciclista quien alcanzó, en sus días de gloria, notoriedad -curiosamente, los dos tocayos nacieron en la misma ciudad y son contemporáneos-. Una apuesta arriesgada para un inexperto en la materia (aunque el ingeniero Hernández la hizo llegando a perfilarse como posible ganador de la contienda quien, con todo lo malo y lo poco bueno, llegó a la segunda vuelta en las pasadas elecciones presidenciales), en una mesa de juego candente cuando el país está en manos de la delincuencia organizada incrustada hasta en el mismo gobierno.
Entra al juego la figura de un outsider de la política que enfrentará a decenas de candidatos de todas las vertientes, ávidos de poder, que irán hasta el final sin importarles que sus ambiciones personales podrán allanarle el camino a la permanencia en el poder al peor gobierno de todos los tiempos como ocurrió en ciertas elecciones, de triste recordación, en las que tres candidatos, tan ingenuos como estúpidos, posibilitaron la desastrosa alcaldía de un tal Petro .
Me pregunto si Santiago Botero ha destapado las cartas en un momento oportuno. Por varias razones diría que sí, ser el primero merma la ventaja que le llevan otros aspirantes en reconocimiento público. Diría que no porque se expondrá a los ataques de sus competidores como ya, y de manera sospechosa, lo ha hecho Semana, medio que dirige la posible candidata Vicky Dávila con un artículo que pone en duda su idoneidad como banquero.
No se necesita ser mal pensado para ver con suspicacia la movida de Semana cuando apenas está brotando la candidatura de Santiago Botero. ¿No será que Vicky Dávila considero que este es el momento oportuno para cortar de tajo el apenas naciente brote antes de que crezca? ¿Por qué el equipo investigador de la revista no se tomó su tiempo para hacer una investigación rigurosa antes de sacar el artículo que cuestiona de manera amarillista, con apenas dos o tres testimonios, al candidato?
Dejo el interrogante y paso a otro asunto. Ya están encima las cruciales elecciones en USA. Trump toma ventaja frente a una Harris que resultó peor como candidata que como vicepresidente. La estrategia demócrata demuestra ser un fracaso.
P.S.: Mi amigo Felipe Olave se dio el gusto de comprar un periódico, se trata de La Nación del Huila. Me ha encomendado coordinar una columna semanal que he titulado “Hablemos de arte en 450 palabras”. Me he puesto en la tarea de invitar a escribir a personas cercanas interesadas en el tema, pero también a los lectores del periódico que quieran participar con un artículo. Poner el tema del arte como motivo de conversación es un pretexto sano para desviar la mirada y ver con nuevos ojos la tan oscura realidad.
Para terminar, me permito compartirles una muy decepcionante experiencia. Estando en Marruecos, el director de la galería que me representa allá me pidió que hablara con las dos casas de subastas de Bogotá, una de nombre Lefebre y la otra Bogotá auctions, para que retiraran de Art Price mis obras ya que no son serias en la valoración de las mismas. Me propuse hacer la tarea personalmente acercándome a cada una de las sedes y me fue como a los perros en misa. Me trataron de tal manera que sentí lo que debe sentir un pordiosero cuando lo dejan esperando en la puerta. He comprobado que no solo son poco profesionales sino además groseros.