Por: @cahurtador
¿Sin horas de descanso?, ¿con el corazón en la mano?, ¿con una ansiedad incontrolable? Señor hincha, usted está ad portas de llegar, junto a estos valientes hombres, a una nueva final de la Libertadores. El sueño continental del que no queremos despertar. Ya ocurrió lo que tuvo que ocurrir en Brasil. Sao Paulo supo quiénes éramos y Borja estuvo imparable. Como muchos goleadores de raza que han pasado por el amado y glorioso equipo del país.
Ya con el resultado sobre la mesa, quiero detenerme en uno de nuestros mejores guerreros. Ya tiene más de 200 partidos disputados y su trabajo es silencioso. Este carrilero representa lo que en una famosa frase del uruguayo Eduardo Galeano, describe a un lateral de fútbol: es un jugador que “corre, jadeando, por la orilla” salvándose de la “fábrica o de la oficina” para ganarse la vida, y de qué manera.
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A punta de sacrificio y superación supo dar la espalda a las críticas para convertirse en indispensable. Sí señores: hablo de Farid Díaz.
¿Quién no recuerda aquel equipo de los ocho millones de dólares del 2012? ‘El Sachi’ Escobar comenzó a plasmar lo que, cuatro años después, se ve representado en una fase definitiva de la Copa Libertadores. Cuatro de las 17 contrataciones ‘rimbombantes’ que se hicieron para esa campaña, son hoy en día la columna vertebral del equipo de Rueda. Me refiero a Macnelly Torres, Alexis Henríquez, Alexander Mejía y al oriundo de Agustín Codazzi (Cesar) que nos da garantías por la banda izquierda.
Tuvieron que pasar tres años para que ‘El Titán’ recibiera un aplauso más que merecido. La tribuna, después de muchos ires y venires, le agradeció en un partido de Libertadores contra Libertad de Paraguay, la dedicación, el esfuerzo y la entrega. “Se me aguaron los ojos. De verdad que me dio mucha alegría. Muy poco pasa en Nacional. Me estaban aplaudiendo a mí y agradeciendo mi entrega por la camiseta”, afirmó en ese entonces al medio AS Colombia, el cesarense que pasó por Bucaramanga, Rionegro y Envigado, entre otros.
Discutido por sus centros poco eficaces, entrenó y mejoró; ajustó también en marca y supo recuperarse de malos partidos como contra Godoy Cruz (Copa Libertadores de 2012), donde a solo minutos del final del encuentro, un mal pase suyo, permitió que el equipo argentino empatara.
Pero, para qué recordar sus pocos malos momentos si nunca le faltó cariño por estos colores. ¿O no recuerdan su cierre prodigioso en la final de 2014 contra Junior? Esa jugada nos ayudó a mantener un resultado que ocho días después nos daría de nuevo, la gloria nacional.
Por cuestiones de la vida, su mejor encuentro lo hizo de volante mixto por disposición del entrenador Juan Carlos Osorio (de lejos su mejor versión), de ahí en adelante ha pasado un año largo en el que se le agradece todo cierre, toda proyección y todo centro al área. No hay discusión: estamos en presencia de un jugador que a sus 32 años se ha sabido reinventar. Nunca es tarde, hinchas.
Pékerman lo tuvo en la mira y hoy funge como lateral indiscutido de la Selección Colombia; para nuestra satisfacción, también es una de las piezas claves para intentar conquistar el sueño continental que este 13 de julio, toma un tinte especial.
En el verde ya tiene 219 juegos disputados entre torneos nacionales y partidos internacionales. En cuatro años al servicio de la institución, logró cuatro ligas, dos copas Colombia y una Superliga, además del subcampeonato de la Copa Suramericana.
Si yo tuviera que escoger a un jugador capaz de inmolarse en un partido para despertar al equipo de un bajón futbolístico, él estaría entre mis elegidos. A tan solo pocos pasos de alcanzar la gloria, sólo le pido que sea capaz de cruzar toda la cordillera con su inquebrantable compromiso. Si pierde la batalla, no hay de qué quejarse si lo entregó todo. Si gana, estará en la vitrina de los gladiadores y los más recordados de la historia verdolaga. ¡No te vayas nunca, gran Farid!
De un hincha para el jugador menos mediático de Atletico Nacional
Mié, 13/07/2016 - 10:26
Por: @cahurtador
¿Sin horas de descanso?, ¿con el corazón en la mano?, ¿con una ansiedad incontrolable? Señor hincha, us
¿Sin horas de descanso?, ¿con el corazón en la mano?, ¿con una ansiedad incontrolable? Señor hincha, us