Frank Martínez se notó muy calmado durante la preparación del plato fuerte. La apuesta del comediante fue un lomo de cerdo ahumado en tomillo y laurel, tinta de calamar para darle color y un jardín de vegetales blanqueados (zanahoria baby, tomates de colores, espárragos).
Frank cometió algunos errores: Por ejemplo, accidentalmente no le prendió el ahumador y se percató tarde, por lo que la carne no alcanzó a ahumarse por completo y esto redujo la calidad del plato.
Aunque era una apuesta interesante, libre de carbohidratos, a Frank no le fue bien preparando el jardín de vegetales. La zanahoria le quedó cruda y no le retiró la piel a los tomates, algo que en la alta cocina se suele hacer después de blanquear los vegetales.
En cuanto a la salsa, los tres jueces concordaron en que tenía una buena intensidad y color, pero que pudo ser mejor y le faltó cocción para lograr una correcta reducción en el punto ideal.
El plato de Frank se llamó ‘Alegría’, dedicado a las personas que lo hacen feliz. Para los jueces fue un plato digno de una final. Buen emplatado, les gustó la propuesta. El término de la carne estuvo a punto.
Ya en el postre, llamado ‘Locura’ por el comediante, Frank le apostó a un crumble de vainilla con piña calada y helado de miguelucho (leche cortada con limón y panela). Frank olvidó poner a hacer el miguelucho y tuvo que reaccionar para lograr el postre a tiempo.
Según los jueces, el postre de Frank le se rajó en el emplatado. Destacaron que el bizcocho quedó bien hecho, la piña también estuvo en el punto ideal. Sin embargo, criticaron que el postre llevara demasiado queso, que era el sabor que predominaba en el plato. Auque el postre tenía picos de ácidos y dulce, los jueces no quedaron del todo convencidos con la propuesta de Frank.