Claudia Bahamón es una de las presentadoras colombianas más queridas y destacadas del público colombiano, que ha seguido los pasos de la neivana desde que comenzó a trabajar en los diferentes proyectos del Canal RCN.
Recientemente la famosa compartió a través de sus historias de Instagram una delicada situación de la que fue testigo. Se trató de un terrible robo que presenció este martes 21 de noviembre cuando se encontraba comiendo en un restaurante de la Zona T y en el que fue víctima el esposo de la presentadora de Noticias Caracol, Alejandra Giraldo.
De acuerdo a Bahamón, se habría tratado de un robo con arma de fuego en la entrada de la panadería Masa, ubicada en la calle 82 con carrera novena en que el empresario y esposo de la periodista tuvo que entregar un lujoso reloj de la marca rolex a dos hombres que tras amenazarlo, huyeron en una motocicleta.
Ante lo sucedido, Claudia no se quedó callada y lamentó la inseguridad y la violencia a la que se está expuesto:
“Duele ver la violencia directo a los ojos. Acaban de atracar con pistola en la cabeza al señor al lado de mi mesa en Masa. Evidente pánico social en el restaurante en donde no teníamos salida. La cobardía del robo a mano armada”, fueron las palabras de la presentadora en una historia de Instagram en donde se ve a la Policía atendiendo lo sucedido.
Aunque esto no fue todo, pues luego de esta compleja situación la famosa decidió utilizar sus redes sociales para dejar un mensaje y hacer una reflexión en una publicación en la que pidió no normalizar la violencia:
“Es aterrador cómo, en nuestra sociedad, tendemos a normalizar la violencia y minimizar sus consecuencias. Frases como ‘ah pero menos mal no le pasó nada’ o ‘lo importante es que tiene salud’ demuestran muchas veces falta de empatía y comprensión hacia las personas que experimentamos situaciones de violencia”, comenzó diciendo Bahamón en su publicación.
Asimismo, Claudia Bahamón pidió dejar de reducir lo que estaba pasando, pues de esa manera lo único que se estaba logrando era que situaciones tan desafortunadas tomarán más fuerza:
“Una pistola de frente o tan cerca a tu mirada como la que vivimos hoy es una situación traumática para cualquiera. Para mi es inaceptable reducir la impotente experiencia a un simple "menos mal que no le pasó nada grave". No acepto perpetuar la idea de que la violencia es algo común y aceptable en nuestra sociedad”.
Finalmente pidió a quienes culparon a la víctima del robo por usar o lucir un reloj caro, replantear si ese era el problema real o si era necesario exigir garantías de seguridad y tranquilidad para todos.
“Debemos dejar de normalizar situaciones de violencia y trabajar para construir una sociedad en la que la violencia sea rechazada y las víctimas sean escuchadas y apoyadas de manera adecuada”, concluyó diciendo.