HBO Max se estrenó este año en Colombia y desde ya se puede decir que entró en el mercado pisando fuerte, y ese es solo el comienzo de esta historia, ya que este jueves 28 de octubre estrena ‘Mil Colmillos’ la primera serie de la plataforma producida completamente en el país sudamericano.
Esta producción pertenece al llamativo género de terror survival, un estilo que no suele ser explorado en la región, contiene siete capítulos que desde ya están disponibles en esta alternativa de contenidos.
La trama retrata a un comando élite que debe escoltar a varios francotiradores para acabar con su objetivo y regresar al punto de extracción, pero la intensidad dramática aumenta cuando uno los soldados empiezan a ser eliminados uno a uno por una entidad sobrenatural, entonces emprenden una carrera para escapar de la selva, mientras deben enfrentarse un secreto oscuro y tenebroso.
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Jaime Osorio, uno de los creadores y directores, dio algunos detalles interesantes al respecto: “Mil Colmillos’ es la conclusión de un trabajo de más de 5 años, en el que participaron más de 500 personas; es un proyecto tan grande y tan ambicioso, que nunca antes se ha visto algo igual en el país ni en Latinoamérica. Las locaciones, la producción, el talento y la historia, la convierten en una serie con grandes valores, además, respaldada por el sello de HBO Max, asegurando una calidad de primer nivel. Si debiera describir la serie con un solo adjetivo diría que es vertiginosa. Y si pudiera sumar otra palabra diría que es absolutamente vertiginosa”.
KienyKe.com asistió a la rueda de prensa de presentación de Mil Colmillos y conversó con Claudio Cataño y Carolina Ribón, dos de los protagonistas, y hablaron de la experiencia de participar en un proyecto de esta calibre:
KyK: ¿Qué se siente participar en la primera serie de HBO producida completamente en Colombia’
Carolina Ribón: Es increíble, es un sueño hecho realidad como actriz, yo desde chiquita miraba HBO y era fan de series de HBO, y llegar a un punto en tu carrera donde te puedes encontrar con esta posibilidad es algo que, literal, no tiene precio, es un sueño cumplido, no solamente por HBO y todo lo que representa a nivel profesional, también a nivel de historia, a nivel de experiencia, todo lo que pasamos y vivimos, siento que soy la actriz más afortunada del mundo por estar en Mil Colmillos, no me cambio por nadie, como persona, como actriz, fue un proyecto que me cambió la vida, fue un proyecto que me enseñó muchas cosas, fue un proyecto que me metió a la industria y conocer gente que a un futuro puedo crear.
A continuación puede ver la entrevista completa con los protagonistas de 'Mil Colmillos':
KyK: ¿Qué opinan de participar en un proyecto inmerso en el terror? Un género que no suele ser tenido en cuenta en América Latina.
Claudio Cataño: Me parece que es necesario, importantísimo, teniendo en cuenta que el género es algo que se está volviendo tan apetecido últimamente a nivel mundial y que se está tomando en serio, es decir, hay una infraestructura que ahora lo está respaldando, ya no es como la película de terror o una cosita de terror, es decir, es un movimiento gigantesco a nivel mundial con un apetito de consumir productos muy grande, yo me he estado relacionando recientemente con eso, tengo amigos que han trabajado en eso, entonces me he ido desayunando, entendiendo este mecanismo gigantesco que hay ahora, la industria del género, más allá del terror, el género es muy amplio, terror psicológico, survival, thriller, surrealista, en fin, hay un montón de posibilidades. Creo que en resumen eso es lo más importante, que haya un montón de posibilidades y puntos de vista de quienes cuentan historias.
CR: Si me remito puntualmente a Mil Colmillos me parece increíble que se cuenten otras historias desde el terror que no tengan que ver con la realidad como tal, te das el lujo de contar historias que, aunque sí están alimentadas de la realidad latinoamericana, cuentan una historia que es ficción, que no necesariamente es real, siento que es una oportunidad para apartarnos de contar las historias de manera documental y darnos el permiso de imaginar historias que antes no se habían contado”.
KyK: ¿Cuál era el reto de trabajar en una historia que exige tanto, física, profesional y emocionalmente a sus actores?
CC: El reto es asumir la invitación a eso, a sumergirse, el reto es asumir la disposición con la que haga esto y es tomar el llamado a la aventura. Yo diría que actuar pensando en género, hablo del universo del actor, no estoy hablando de la cinematografía, o del universo del director, en fin, en mi caso sería un despropósito porque yo no puedo objetivizar de esa forma mi viaje, entonces yo no pienso: ‘estoy en terror’ o estoy en esto, pero sí hay una cosa, si hablamos de géneros específicos, un tema formal, el de survival, que finalmente es una descomposición y una desfragmentación de la humanidad, de lo que aparentemente eres al principio y en lo que tienes que convertir y no convertir, lo que finalmente emerge y lo que siempre ha sido en esas situaciones límites y eso es un poco lo que pasa en esta historia, los personajes se van desfragmentando, hasta que aparece lo esencial, lo primordial de sus seres, lo animal.
CR: Además de la disposición que habla Claudio, como decir ‘sí’, hay una confianza con el equipo, que aún así te estés sumergiéndote en unas situaciones que son extremas y que están al límite, como que tienes a un equipo que te está soportando y en el momento de decir: ‘corte’, tienes a un equipo y no te quedas conteniéndote en el personaje, hay todo un equipo profesional que te está conteniendo y que te están apoyando, tanto en el set, dentro de la historia, como cuando te dicen: ‘corte’ y ya puedes descansar.
