El Porto, que venía de batir a la Juventus en el duelo de ida por UEFA Champions League, consiguió clasificarse a octavos venciendo 4 a 4 en el mercador global a la Juventus
Una vez el árbitro Kupiers anunció el inicio del compromiso, ninguno de los dos conjuntos pensaba en guardarse nada. Los primeros diez minutos fueron intensos, y hubo oportunidades para cada lado.
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En principio, Juan Guillermo Cuadrado avisó en el área rival con uno de sus venenosos centros desde la zona derecha de la cancha, y tan sólo a los tres minutos, enviaba el pase al medio encontrando a Álvaro Morata, a quien le fue negado el gol gracias a la buena reacción del guardameta Marchesin.
Sin embargo, otros tres minutos después, el lateral colombiano falló al momento de controlar un balón cerca a la portería de Szczesny, lo que desencadenó en un robo de Sansui quien conectó con el jugador del Porto, Taremi, para que el delantero buscara impactar de cabeza, con la mala fortuna de estrellar la bola en el travesaño
Esta última acción sería un vaticinio de lo que pasaría al 17 de juego. Después de observar el pase de Marega a Taremi, el defensor de la Juventus Merih Demiral, intentó evitar la recepción de su rival, pero, al no medir su intercepción, terminó cometiendo un claro penalti que más tarde capitalizó Sergio Oliveira para subir el primero gol de la noche al marcador.
Ya en la segunda mitad, la Juventus salía decidido a conseguir el empate, y al minuto 49 le caía un pase englobado a Cristiano Ronaldo, quien optó por dejarle el esférico servido a Federico Chiesa, para que lanzara un tiro que ascendió gradualmente hasta ubicarse en la escuadra del portero, logrando así el 1 a 1.
La suerte en este parcial corría de parte de los dirigidos por Andrea Pirlo, pues, además del tanto conseguido, el árbitro condenaría una acción donde Taremi alejó el balón después de haber pitado una falta a favor de la ‘Juve’. Esto le significó ganarse la segunda amarilla al delantero del Porto y consecuentemente tuvo que salir expulsado del encuentro.
El dominio absoluto era de la Juventus, y no tardaría en demostrarlo en el marcador, pues Cuadrado, con uno de sus característicos centros desde casi tres cuartos de cancha le ponía el balón de manera precisa en la cabeza, nuevamente, a Chiesa, quien, mano a mano con Marchesin, remató de primera y les dio la ventaja a los italianos.
El resultado se mantendría y el partido debía decidirse en el tiempo complementario. Durante este periodo, el encuentro estaba en tierra de nadie. La sensación del enfrentamiento era que cualquiera de los dos conjuntos podía llevarse la serie al necesitar un solo gol. A pesar de que ambos equipos tuvieron suficientes ocasiones para anotar, el Porto conseguiría el tanto en una jugada poco esperada.
Corría el minuto 115 de juego, y Sergio Oliveira se disponía a cobrar un tiro libre lejano al arco de Szczesny, pero el mediocampista tenía en su mente una jugada preparada. Oliveira envió un potente remate a ras del césped que se paseó por debajo de la barrera de la ‘Juve’ y entró en la portería rival, amargándole la noche a la Juventus
Sin embargo, las esperanzas para los ‘bianconeros’ las revivió Rabiot, dos minutos después, entrando al área y con un cabezazo, sorprendiendo a Marchesin y yéndose 3-2 por encima, necesitando aún un gol para clasificarse que finalmente no llegó.
Con esta ocasión, el Porto logra alcanzar los cuartos de final después de no haber podido ni siquiera llegar a la fase de grupos en la temporada pasada de la Champions League, donde fue eliminado por el Krasnodar en los clasificatorios con un marcador global de 3 a 3.
