El diálogo entre Fabio Zuleta y un palabrero guajiro dejó en evidencia la explotación sexual a la que son sometidas las mujeres Wayuu. Según el entrevistado, niñas de 20 años de edad son vendidas por cinco millones de pesos.
Esta entrevista, aunque no salió al aire quedó registrada en un video y se volvió viral en las redes sociales generando repudio y rechazo en los ciudadanos, organizaciones y el presidente de la República Iván Duque.
Asimismo la emisora a cargo, Sistema Cardenal, suspendió temporalmente el programa 'Buenas tardes con Fabio' por utilizar palabras obscenas contra la mujer de la Alta Guajira.
A esta ola de críticas se unió la ONU en Colombia. Con una posición clara y tajante, el organismo rechazó el video protagonizado por Fabio Zuleta y el ciudadano guajiro.
"Las mujeres claman que ni ellas ni sus cuerpos están en venta, y que la explotación sexual es también una violación de sus derechos fundamentales", señaló en un comunicado.
Respecto al matrimonio infantil forzado, tema que también se trató en el diálogo, la ONU calificó este hecho como "una práctica nociva que viola los derechos humanos" debido a que trae graves consecuencias para las mujeres wayuu y niñas y adolescentes de cualquier comunidad.
La ONU precisó en que esta práctica no solo se desarrolla al norte de Colombia, sino también en diferentes poblaciones del territorio nacional.
"Según la Encuesta Nacional de Demografía y Salud -ENDS (MSPS, 2015) más del 13% de las adolescentes encuestadas entre 15 y 19 años están unidas conyugalmente, y el 43% de ellas están unidas con parejas 6 o más años mayores", manifestó la organización.
Agregó que el matrimonio infantil hace que las niñas pierdan su autonomía sobre sus derechos sexuales y reproductivos. Además afirmó que "aumenta la probabilidad de experimentar violencia de pareja y otras formas de violencia de género durante su vida".
La ONU en Colombia y autoridades indígenas ratifican su labor para acabar con esta práctica que ha venido afectando el desarrollo de cientos de niñas en Colombia.
"Hacemos un llamado para que rechacemos cualquier acto que atente contra la dignidad y la vida de niñas, adolescentes y mujeres, con particular atención a los derechos de las mujeres indígenas y de comunidades étnicas", concluyó la ONU.