El ministro de Salud y Protección Social, Fernando Ruiz, aclaró que la llegada de un cuarto pico "es una eventualidad real", y que, aunque muchos han venido relajando las medidas debido a la reducción de casos, hay una probabilidad muy alta de que el país viva un nuevo aumento de contagios.
La circulación de la variante Delta y la predominancia en el territorio nacional de cepas de interés como Mu; muchos se preguntan si el país está próximo a atravesar un nuevo pico. Según indicó Ruiz, las proyecciones del Ministerio y del Instituto Nacional de Salud (INS) son que "el cuarto pico podría darse hacia la última semana de octubre. Este podría tener una duración más corta que el tercer pico que tuvimos, pero todavía es una incógnita la mortalidad que podríamos tener", dijo.
Dicha incógnita estaría relacionada con dos variables: el efecto protector de la vacunación, versus el impacto de las variantes altamente contagiosas que hoy circulan en el territorio nacional. Por eso, la cartera de salud ha sido enfática en que la mejor manera de evitar desenlaces fatales, como lo han vivido otros países, es acelerar la vacunación.
"El cuarto pico tiene una probabilidad muy alta de darse y todos debemos ser responsables en la prevención de la mortalidad de la población. En ese sentido, hay dos líneas importantes de trabajo: seguir con las medidas de bioseguridad, es decir mantener el uso del tapabocas y vacunarse", sostuvo.
Al respecto, el jefe de la cartera de Salud hizo un llamado especial a los mayores de 50 que aún no se han vacunado; y recordó que las cifras indican que la mortalidad se concentra en quienes no están inmunizados. "La invitación es a vacunarse, porque pueden tener una alta mortalidad comparado con el resto de la población", aseveró.
Aunque para muchos expertos el cuarto pico es una realidad cercana, es posible que este se aplace algunas semanas o incluso meses si se mantienen las medidas de bioseguridad y se acelera el proceso de vacunación en el territorio nacional. Según Víctor Muñoz, Director del Departamento Administrativo de Presidencia, las cifras actuales aún no dan para un pico de contagios.
Análisis universitarios de Facultades de Medicina confirman alta probabilidad de un cuarto pico de contagios
Algunos profesionales de Salud Pública y Epidemiología de la Universidad CES, también confirman que el cuarto pico de contagio podría darse a finales de este mes, de acuerdo con el análisis de modelos de tendencia cuadrática, epidemiológicos básicos o comportamentales del contagio, a los que recurrieron.
“Actualmente Colombia está en altísimo riesgo de desarrollar un cuarto pico de contagio por COVID-19 esto es debido a la alta transmisión comunitaria que estamos teniendo del SARS-CoV-2. Según los modelos existentes se habla de una extensión hasta julio e incluso otros modelos hablan de octubre con un nuevo pico o una situación de rebrote por COVID-19”, expresó Yessica Giraldo Castrillón, epidemióloga y docente de la Facultad de Medicina de la Universidad CES.
Entre los factores que podrían conllevar a un cuarto pico de contagio están la detección de nuevas variantes circulando en el territorio nacional, cuyas mutaciones afectan la capacidad inmunológica de la respuesta. Según el Instituto Nacional de Salud (INS) en Colombia se comprobó la circulación de 50 linajes o variantes de SARS-CoV-2. El linaje más común en el país es el B.1.111. Las más predominantes son la brasileña y la británica.
“Otro factor que puede incidir en este pico es el relajamiento de las medidas y la reapertura total ya que esto favorece la circulación y la interacción entre las personas y a su vez aumenta la transmisión del virus. También, las medidas en salud pública son más débiles: hacer menos pruebas, hacer menos rastreos va a favorecer la transmisibilidad del virus”, añadió la médica Giraldo Castrillón.
En el aspecto de Salud Pública coincide la doctora Suárez Sanabria quien enfatizó que: “Las medidas de vigilancia epidemiológica no son las adecuadas. Debe hacerse una búsqueda activa lo cual implica que por cada persona que se detecte positiva se hagan las suficientes pruebas a su alrededor de personas que estuvieron en contacto para detectar nuevos casos”.
Ambas expertas coinciden en que es necesario adoptar varias acciones para disminuir la velocidad de contagio. Entre ellas, insisten en mejorar la velocidad del Plan de Vacunación Nacional, incrementar las medidas de vigilancia epidemiológica masiva, aumentar la aplicación de pruebas, rastreo y, si es necesario, medidas que restrinjan la movilidad de las personas.