El pasar por una cárcel es para muchos uno de los mayores temores por cuenta de los mitos que rodean la experiencia carcelaria en Colombia. El maltrato por parte de otros presos, la mala calidad de los alimentos, el compartir con varios de los más peligrosos delincuentes del país, es una experiencia por la que muy pocas personas quisieran pasar y sin embargo, sobre ello trató la más reciente entrega de Zona Hostil, el formato de Kienyke.com para retratar los espacios más difíciles de sociedad colombiana.
Se trata de ‘24 horas preso en La Picota: Un día entre criminales’, la más reciente entrega de Zona Hostil en la que su equipo se adentró en los pasillos de la cárcel La Picota para evidenciar, en un trabajo de periodismo inmersivo, cómo es la situación al interior de este infierno de celdas y barrotes, donde a pesar de los títulos y los arrepentimientos, se purgan los errores y se sobrevive, sorteando a los criminales que siempre están atentos a la llegada de ‘carne fresca’.
“Tenemos los baños llenos de mier%$#, venga por acá arriba para que vea la verdad, para que vea que por acá se sufre”, fue uno de los gritos de bienvenida que recibió Raúl Arévalo, el periodista que por 24 horas experimentó lo que es estar preso en Colombia y dejar atrás el calor de hogar, los amigos, la tranquilidad y muchas otras cosas que en el día a día se dan por sentadas, pero que al interior de una cárcel se aprenden a valorar.
Allí la sensación de peligro es constante, así como las agresiones y hurtos entre reclusos que, a pesar de los esfuerzos del INPEC, se aprovechan de los nuevos internos, los despojan de sus elementos de aseo y por medio de la violencia los extorsionan incluso para tener un espacio en el cual dormir.
“Acá usted no entra con nada, si no hubiera sido por los pabelloneros usted no tendría colchoneta ya, no tendría ni chaqueta. Así es la vida en la cárcel. Todo lo que usted trae para nosotros es nuevo (...) Por ejemplo, yo a usted le podría pedir $500.000 por esa colchoneta, si no, esta noche no duerme en ella. Si usted no me los consigue, duerme en el piso”, reveló David, una persona privada de la libertad, sobre lo que se vive al interior de La Picota.
A lo largo de 2023, y en lo que viene para 2024, Zona Hostil llegará a los lugares más difíciles e inhóspitos de la sociedad colombiana. Un proyecto que junto a kienyke.com busca mostrar las realidades que están muy cerca de todos, pero que muy pocos se han atrevido a realmente ver.