El coronavirus ha sacudido la economía mundial y el confinamiento ha provocado pérdidas millonarias en miles de empresas. No obstante, siempre hay excepciones. Es el caso de Zoom, dedicada a la realización de videoconferencias, cuyo valor ha subido a más de 39.000 millones desde el inicio del confinamiento según Nasdaq.
A pesar de las dudas existentes sobre su seguridad, la aplicación se ha convertido en líder de la comunicación a distancia gracias a su funcionamiento y detalles como su interfaz en forma de cuadrícula o su fondo personalizado. Un reinado con el que quiere acabar la competencia.
Para ello, muchas aplicaciones han decidido adaptar características de Zoom. Así, Skype, en su última versión para Windows, Mac, Linux y web, permite cambiar el fondo. Así, ahora, los usuarios pueden colocar una imagen predeterminada, una propia o utilizar el desenfoque para que no se vea que hay detrás. Opción que se encuentra en los ajustes, en la sección de Audio & Vídeo.
Posibilidad que también incluye Microsoft Teams. La app del gigante estadounidense para el sector empresarial se ayuda de fondos personalizados para ocultar lo que se ve a través de la cámara, al igual que Skype, perteneciente a Microsoft.
También se suma a la carrera de mejoras Google. Así, la compañía introdujo en su servicio de videollamadas Google Meet el formato mosaico típico de Zoom. De esta manera, ahora se pueden visualizar hasta 16 personas a la vez, muchos más que los cuatro participantes que permitía antes. Eso sí, todavía está lejos de las 49 miniaturas que puede generar Zoom.
Más allá del modelo cuadrícula, Google Meet también ha mejorado la calidad de vídeo y sonido. Así, la app elimina los ruidos de fondo mediante un filtro inteligente e iluminará la imagen de manera automática, si el usuario se encuentra en un sitio oscuro. Por otro lado, la conversación se podrá presentar ahora en una pestaña de Google Chrome y no hará falta que sea una ventana o pantalla completa.
Mejoras que no se quedan solo en Google Meet, sino que también llegan a Google Duo. A diferencia de la primera, pensada para el trabajo, esta aplicación sirve para llevar a cabo conversaciones más personales, en las que ahora podrán participar hasta 12 personas. Videoconferencias que pasan a tener una calidad superior gracias al cambio de códec y en las que podrán hacer fotos, capturas de pantalla e introducir efectos en realidad aumentada.
Incluso aplicaciones que no centran su negocio en las videollamadas han perfeccionado su sistema. Es el caso de Whatsapp que ha ampliado a ocho el número de participantes en una conversación.
Cambios con los que pretenden recortar distancias con Zoom, que junto a las otras app, se aprovechan de un escenario en el que la videoconferencia se ha convertido en fundamental para el desarrollo profesional y personal.
Pero además con el Coivid la manera de socializar cambió, la virtualidad es la más poderosa herramienta de comunicación entre los seres humanos en esta coyuntura de la pandemia. Pensando en esto unos jóvenes emprendedores desarrollaron una plataforma virtual Parches Moai que en un solo lugar reune planes y experiencias, con los que busca que las personas formen “parches” una especie de comunidades privadas de amigos o familia y que se conecten para disfrutar de experiencias online a través de sus pasiones como pintar, meditar, practicar yoga, trucos de magia, belleza y otras actividades lúdicas.
La naturaleza del ser humano es ser social. Por ello, durante la cuarentena se han agudizado este tipo de problemas mentales. Así que decidimos apostarle a desarrollar actividades grupales virtuales que le permitan a las personas hacerle frente a esta situación y mejorar su salud emocional”, explica María Isabel Correa,
psicóloga y cofundadora de Parches Moai, emprendimiento colombiano especializado en este tema.
Con información de SPUTNIK.