La falta de compromiso de algunos habitantes con el cumplimiento de las medidas preventivas que decretó el Gobierno Nacional en todo el país obligó a la Gobernación de Cundinamarca a tomar una rigurosa decisión en el municipio de Girardot.
El acuerdo se logró con la Alcaldía de la ciudad luego de una evaluación y balance que se realizó entorno al comportamiento de la población durante los primeros días de la cuarentena.
El gobernador Nicolás García aseguró que la región será militarizada con presencia del Ejército y la Policía Nacional para que las medidas se acaten, y con ello, conseguir una reducción significativa en la curva de contagios.
García aclaró que el acompañamiento de la Fuerza Pública será “para el cumplimiento de la medida en Girardot y otras ciudades que agrupan la mitad de los comparendos de todo el departamento”.
267 policías que trabajan en el Alto Magdalena y 60 soldados del Ejército serán los encargados de prestar el servicio en la zona urbana y rural, vigilando por tierra y agua que las medidas se acaten según lo que acordó el gobierno.
El gobernador de Cundinamarca confirmó que en Girardot no se ha presentado ningún caso por coronavirus; sin embargo, hay “más de veinte pruebas en este momento en estudio en el Instituto Nacional de Salud de posibles casos aquí”, manifestó.
Además del control de seguridad el municipio también tendrá 58 camas UCI y más de 300 hospitalarias. Donde estaba ubicada la antigua cárcel va a funcionar el Centro de Atención Primario que fue levantado con los recursos del departamento.
Durante este martes 31 de marzo se hizo entrega de más de 30.000 mercados en los barrios más críticos de Girardot. No obstante, la labor continuará durante los siguientes días en todo el municipio.