Satan 2 es el nombre del misil que Rusia probó ayer con todo éxito y que, en caso de utilizarse, sería capaz de destruir una región del tamaño de Francia.
Así es como Putin muestra sus dientes al mundo Occidental, luego de expulsar a 60 diplomáticos estadounidenses, cerrar su consulado en San Petersburgo; y declarar ‘no gratos’ a 46 representantes de otros 18 países que hicieron lo propio con los funcionarios del Kremlin en sus territorios.
https://twitter.com/mod_russia/status/979554054593368064
El Jueves Santo, Putin presentó videos de su poderosa arma con infografías del misil sobrevolando territorio norteamericano con blanco en La Florida y le envió un mensaje a Washington: "El sistema antimisiles estadounidense será inútil y no tendrá ningún sentido. Nadie en el mundo tiene algo igual. Es fantástico”.
Se tensan las relaciones y el mundo se polariza mientras los gigantes se hacen mutuamente demostraciones de poder. Y mientras tanto, como si nada, dan explicaciones que se difunden en los medios de comunicación y las redes sociales, acompañadas de noticias menos graves y hasta banales.
https://twitter.com/jrubiomart/status/979805191267667969
La cancillería rusa emitió un comunicado acusando a los servicios de inteligencia estadounidenses de proponer 'ayudas' a cambio de relaciones secretas 'sobre la base de la ventaja mutua’. Lo que calificaron de “drásticas acciones provocadoras”.
El portavoz de la Casa Blanca Heather Nauert también se pronunció en nombre de Trump respecto a la expulsión de sus diplomáticos: "No hay ninguna justificación a la reacción rusa”, y hasta ahí, porque el presidente se reservó su deseo de responder.
Todo empezó con el envenenamiento de Serguéi Skripal, el doble espía ruso, quien estaba con su hija Yulia en Salinsbury, al sur de Reino Unido, cuando cayeron inconscientes a la entrada de un banco.
Según las investigaciones, padre e hija, fueron expuestos a un agente neurotóxico llamado Novichock, que fue desarrollado en la Unión Soviética durante la Guerra Fría.
Sin mas pruebas, la ministra Theresa May, culpó a Rusia del envenenamiento, expulsó 23 funcionarios de Kremlin y en represalia, ellos hicieron lo mismo, con la misma cantidad de diplomáticos. Un par de semanas mas tarde, Estados Unidos y 18 países más, los siguieron.
https://twitter.com/ahlulbaitEs/status/978500775839195136
Según los analistas, la furia de Putin se debe a que, con la expulsión de sus diplomáticos, la mayoría pertenecientes a sus servicios secretos, Rusia pierde la capacidad de recopilar información y llevar a cabo sus operaciones de inteligencia.
Algo similar sucedió durante la Guerra Fría, que muchos insisten en recordar, cuando los gobernantes, sin irse a la guerra, se demostraban hostilidad, se hablaban en lenguaje belicoso y tenían intenciones hostiles.
https://twitter.com/LaReEvolucion12/status/978399445988626434
Pero los opinadores han llegado a la conclusión de que esta nueva crisis diplomática no tiene antecedentes, en especial por las características de los mandatarios de las dos potencias del mundo: son populistas, arrogantes y magalómanos.
Y con un botón pueden activar los arsenales atómicos mas poderosos del planeta.
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