
Sin embargo, más allá de sus logros profesionales, la bella arquera también ha cogido fama por otras cosas no tan buenas. Una de ellas es su mal carácter, como relata La Vanguardia, han sido varias las ocasiones en las que se ha visto envuelta en enfrentamientos tanto con compañeras de equipo como con entrenadoras y en algunas ocasiones a modo de castigo se ha quedado fuera de una que otra convocatoria.
Pero su mal genio no termina ahí. También ha enfrentado cargos de violencia doméstica por agredir a su media hermana Teresa Obert, y a su sobrino durante un evento familiar. "Ella lo agarró por la cabeza y siguió golpeándolo en el cemento una y otra vez... Así que me puse atrás de ella y la detuve y, ya sabes, para alejarla de mi hijo. Y luego, una vez que ella se alejó, empezó a pegarme en la cara una y otra vez", dijo Obert a los medios.
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Pero los escándalos continúan y uno de los que más la afectaron fue la filtración de unas fotografías en las cuales se le veía en poses bastante pornográficas. Luego de su hackeada, la guardameta no podía más que resignarse y mandarle un mensaje al mundo acerca de la violación a su privacidad.
“Es extremadamente triste y desafortunado que los derechos de tantas mujeres hayan sido violados por la publicación no autorizada de fotografías privadas. Este acto sobrepasa los límites de la decencia humana y como tal, me uno a todas las mujeres afectadas por esta situación y estoy explorando todas las opciones posibles para proteger mi privacidad". Sumado al anterior hecho que por sí solo es bastante polémico y duro de superar, le entra en competencia el momento en que la sancionaron por dar positivo en un control antidopaje.
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Pero después de superar los anteriores episodios . En 2015 la deportista volvió a estar en boca de todos al ser detenida junto con su marido, Jerramy Stevens, exjugador de la NFL, por conducir bajo los efectos del alcohol y agredir a los agentes de policía.
Finalmente, esta semana dio de nuevo de que hablar debido a una fotografía que no le hizo mucha gracia a los brasileños. Hope Solo compartió una imagen en su cuenta de Instagram en la que aparecía cubierta con una malla negra y tenía un repelente en su mano para evitar el piquete de mosquito que transmite el ‘Zika’.
Durante el partido en el que Estados Unidos venció por 2-0 al equipo de Nueva Zelanda los gritos de ‘Zika’ por parte de los fanáticos sonaban cada vez que la guardameta del Equipo de Estados Unidos entraba en acción.