La Fundación Breakthrough reconoce anualmente a los científicos que hacen grandes contribuciones al conocimiento. En total, entrega $18.75 millones de dólares para apoyar a los científicos que trabajan en las preguntas más fundamentales. El objetivo de este premio es ayudar a los científicos a seguir trabajando en sus temas sin las limitaciones propias de los modelos de financiación de la investigación científica. De esta manera, la Fundación busca fomentar una cultura en la que las búsquedas intelectuales sean promovidas y esto sea un mensaje para las próximas generaciones.
En el 2018 la Fundación Breakthrough le otorgó al matemático Sebastián Hurtado el premio New Horizons 2022 por los avances que hizo para comprobar la conjetura de Zimmer. Este reconocimiento, en el mundo de las matemáticas y otras ciencias, equivale al premio Cervantes en el mundo de la literatura o a los Óscares en las películas. En ese sentido, esta noticia es de gran importancia para la comunidad científica y para la sociedad colombiana, pues los pilares de su formación científica los obtuvo en la Universidad Nacional de Colombia, institución en donde se formó como matemático.
Ante esa gran noticia, varios medios de comunicación colombianos lo contactaron para conocer un poco al ser humano que había detrás del premio que le otorgaron. Sin embargo, las preguntas y los comentarios que le hicieron los periodistas demuestran muy poco conocimiento del mundo científico que rayan con la falta de respeto.
Me refiero aquí de la entrevista que le hicieron los periodistas de la emisora “La FM” que inicia con la afirmación, por parte del periodista, que felicita a Hurtado por haber resuelto la conjetura de Zimmer. Ante esta frase Sebastián le gritó al periodista que eso no era cierto. Pese a ello, el entrevistador continuó usando los micrófonos de un medio de comunicación masivo para seguir afirmando algo que estaba siendo desmentido por el galardonado, pues Sebastián contribuyó a resolver la conjetura de Zimmer. En el mundo científico este tipo de imprecisiones son delicadas pues es como decir que la vacuna contra el COVID19 erradicó la enfermedad. El mundo científico es de procesos en donde varios investigadores van haciendo poco a poco contribuciones que, con el tiempo, van generando cambios importantes en el mundo.
Sin embargo, esa no fue el único punto negro de la entrevista. Después de esa introducción errónea, otra periodista le preguntó que si él era malgeniado como otros científicos que habían entrevistado. Luego, entre risas, los periodistas hicieron comentarios sobre el aspecto físico del matemático adulando su pelo largo, su barba y sus gafas asimilándolo a un nerd. Finalmente, la entrevista concluyó con un comentario sobre la capacidad mental que debía tener el galardonado matemático que le permitía no tener que usar una calculadora para multiplicar.
Lo anterior muestra una muy baja preparación de los periodistas para abordar temas científicos. También evidencia un poco inversión de tiempo en la preparación de unas preguntas pertinentes y adecuadas para entablar una conversación constructiva con una persona, como Sebastián Hurtado, que fue reconocido con un premio internacional.
Tener un micrófono y usar unos medios de comunicación masiva debe conllevar una responsabilidad, pues pueden estar amplificando un mensaje de banalización de la ciencia o del orgullo de la investigación científica. Usar los micrófonos para relacionar a un científico con un estereotipo social estigmatiza a los investigadores y, como lo afirmó Sebastián, desestimula a los niños y niñas que tienen interés en la ciencia de seguir el camino de un nerd.
Los periodistas no pueden usar su capacidad de comunicación en medios masivos sin preparase para intercambiar palabras e ideas con sus entrevistados. Tampoco deben estigmatizar a los científicos ni a los que impulsan las investigaciones en una sociedad. Más bien, deberían usar sus micrófonos para hacer preguntas asertivas para que los oyentes entiendan mejor cuál fue el esfuerzo que hay detrás de una meta como la que logró Sebastián, que los espectadores identifiquen el camino que siguió este matemático y finalmente, que lleguen a enorgullecerse de este colombiano en lugar de generar unas conversaciones que, entre risas y elogios desatinados, evitan que la sociedad colombiana entienda y valore el esfuerzo que se hacen los investigadores colombianos.
Para una adecuada construcción de una cultura basada en el conocimiento es necesario que confluyan actores como el estado, la universidad, las empresas, la sociedad civil y los medios de comunicación. En ese escenario, es importante que los periodistas reconozcan la importancia de su rol pues, para que Colombia dé realmente el paso hacia una sociedad del conocimiento requerimos de unos periodistas preparados para hacer las preguntas adecuadas a los científicos y científicas colombianas.