Todos sabíamos que el 2023 sería un año complejo en cuanto al oportunismo de ciertos individuos para conseguir votos y esto, producto de las contiendas electorales territoriales. Sin embargo, hay que ver con angustia como los procesos ciudadanos - que en inicio aparentaban ser sin ánimo electoral- terminan siendo solo una cuota de x o y organización.
Ibagué está minada de generadores de contenido, vídeos de entretenimiento, burlas y demás, algo que no es para nada malo, porque reírse es necesario. Pero, si hay que fijar límites en lo que es producir contenido de entretenimiento con un fin lucrativo, a querer disfrazar las acciones “sociales” cuando en realidad siempre existen intereses particulares.
Por ejemplo, un par de pelados en Ibagué, llevan unos años haciendo un ejercicio voluntario de tapar huecos de la ciudad, objetivo que es destacable, lo que no se aplaude es que esos mismos jóvenes, aprovechen la situación de favoritismo y congestión mediática que genera el acto, para acarrear votos. Y esto porque lo digo, hace unas semanas una candidata del partido conservador hizo una reunión en la cual ellos afirmaban el apoyo y así mismo se unían al ejercicio político de ella. Ahora bien, no se juzga que participen en política puesto que es un deber constitucional que tenemos todos, lo que sí merece cuestionamiento es que lo hagan con miras a arrastrar electores por medio de la actividad que desarrollan.
Además, para nadie es un secreto el vídeo que ese par de jóvenes sacaron en contra del alcalde, en donde manipularon su respuesta y después a él tocó sacar la versión completa. Y esto lo pongo sobre la mesa porque nuestro alcalde es electo por la misma corporación que ellos están apoyando entonces ¿Dónde está la coherencia de los pelados? Ojo, no hago un juicio de valor hacia el partido porque están en la libertad como cualquiera, en apoyar a quien deseen, independiente de a quién respalden, lo que se repugna es la manipulación que se da a través de sus labores sociales supuestamente desinteresadas.
Ahora, no es solo el tema de quienes tapan huecos, ese es solo un caso, sino de muchas personas que buscan disfrazar luchas sociales para tener votos, no demoran en promocionar actividades ambientales, de donación o de apoyo al prójimo, con tal de amañar seguidores. Pero todo esto nos debe llevar a una sola conclusión y es… ¡No dejarnos engañar!, no promover a quienes, con malas intenciones, o mejor, simplemente, intenciones personales, vienen a tender la mano, porque con esa mano que estiran después lo sueltan.
Esta columna fue más corta, pero más precisa, sé que despertará quizás mensajes a favor de los sujetos mencionados, pero es hora que despertemos, creo que el fin es claro, no apoyemos a quienes solo buscan lucrarse con una pantalla de buenas intenciones, no permitamos que sigan manipulando a través de las redes sociales.
Un abrazo y Dios les bendiga.