La telenovela 'Pedro Pablo' no solo cautivó a la audiencia con su apasionante historia de amor entre los personajes interpretados por Roberto Cano y Carolina Acevedo; su trama se trasladó a la vida real, llevando a los actores a un matrimonio que, aunque efímero, marcó un capítulo significativo en sus vidas. Sin embargo, la historia de amor se complicó, mostrando que a veces la ficción supera la realidad, pero también que la vida puede tomar giros inesperados.
En una reciente entrevista con Laura Acuña, la actriz ibaguereña recordó cómo, a sus 20 años, se vio atrapada no solo en la narrativa de su personaje, sino también en el encanto de su compañero de reparto. "Me enamoré de Pablo, de la historia de amor de la novela", confesó. Sin embargo, la chispa que una vez brilló con fuerza pronto se apagó. Ella reveló que el matrimonio no duró mucho tiempo, y la razón se remonta a la participación del bogotano en 'La isla de los famosos'.
Durante la ausencia de Roberto Cano, Carolina Acevedo encontró el amor en otra persona. A su regreso, Cano no solo se dio cuenta de que la conexión con su esposa se había desvanecido, sino que también descubrió mensajes de texto que confirmaban sus sospechas. "Cuando Roberto volvió, yo ya no sentía nada. Él imprimió todos los mensajes y me dijo: ‘Nos separamos’. Y yo simplemente respondí: ‘Ok’”, relató, con una mezcla de nostalgia y aceptación.
A pesar del dolor de la separación, la pareja mantuvo una relación amistosa, incluso viviendo como compañeros de cuarto durante un año tras su divorcio. Cano, por su parte, admite que sí experimentó una "tusa" por Acevedo, lo que demuestra que los lazos creados en el set de filmación perduran más allá de la pantalla.
Carolina no se detuvo en el amor perdido. Después de su primera unión, se casó nuevamente con el empresario Salomón Korn, con quien tuvo un hijo, pero la relación también terminó tras ocho años. Sin embargo, el destino le tenía reservado un nuevo capítulo: encontró el amor en Lucas Jaramillo, exmarido de su prima Cristina Umaña. Ahora, Carolina vive una nueva etapa de su vida, esta vez con la experiencia y la sabiduría que le ha otorgado el tiempo.