A comienzos de 2022, el presidente Iván Duque junto con el alcalde de Barranquilla, Jaime Pumarejo, sorprendieron al país con la idea de que la 'Arenosa' fuera sede de un circuito de la gran carpa del automovilismo mundial. Como era de esperarse, se generaron todo tipo de comentarios por la propuesta del primer mandatario para acoger una carrera de la Fórmula 1.
Esto fue lo que escribió en su momento Iván Duque en su cuenta oficial de Twitter. “Acompañamos el sueño que tiene el @alcaldiabquilla, @jaimepumarejo, que Barranquilla sea vinculada en el calendario de circuitos de la Fórmula 1 con un Gran Premio en Colombia, que traería enormes beneficios económicos y turísticos para la ciudad. Cuente con nuestro respaldo”.
Gustavo Petro ha dejado clara su opinión sobre uno de los mayores proyectos deportivos del país a futuro, tener un Gran Premio de la Fórmula 1 en Barranquilla.
En medio de un acto político, el periodista Felipe Reyes le preguntó al futuro mandatario del país sobre su opinión de tener un Gran Premio en Colombia y este respondió: "Primero hay que resolver el hambre. Sin resolver el hambre lo que tendríamos es como un insulto a la sociedad más pobre". Expresó que una vez se atienda ese asunto, ya se puede pensar en la Fórmula 1.
Ser sede de unas válidas de la Fórmula 1 implica una alta inversión por parte de los organizadores al ser un evento de gran envergadura internacional. Si bien no hay una cifra exacta para acoger una carrera de la F1, la inversión que se debe tener para cumplir con las exigencias es bastante considerable.
Eso sí, el alcalde de Barranquilla, Jaime Pumarejo, se mostró muy convencido. “Hay veintidós ciudades en el mundo que pueden decir que tienen un circuito de la Fórmula 1. A esos circuitos asisten 320.000 espectadores en tres días; gastan en promedio $USD600 al día y viajan desde más de 100 países. Entran 60.000 turistas internacionales en un lapso de 10 días. Eso es casi que duplicar el número de visitantes internacionales que vienen al Atlántico en tres días y en un solo evento".
Según las cifras del Dane, Barranquilla es la peor ciudad en seguridad alimentaria, pues ocupa el último lugar del ranking, ya que solo el 33 % de sus habitantes consume tres comidas diarias.