Eran casi las 10:00 de la noche del jueves 11 de junio de 1992 cuando Rafael Orozco Maestre, voz líder del grupo vallenato El Binomio de Oro, fue blanco de un terrible ataque sicarial en la puerta de su casa ubicada en un exclusivo sector al norte de la ciudad de Barranquilla, Atlántico.
El artista salió unos minutos de su casa en la que se realizaba una fiesta tras su llegada de una gira musical realizada en Venezuela. Unos integrantes de la agrupación de Diomedez Díaz llegaron a la residencia para pedirle unos instrumentos prestados y, mientras charlaban, un hombre alto y delgado apareció en el lugar y le disparó a aproximadamente tres metros de distancia, luego se acercó, lo remató y escapó.
En total fueron diez tiros. Nueve de ellos le dieron en el rostro, en la espalda y en los glúteos; el último no lo alcanzó a impactar.
Al escuchar los disparos, Clara Cabello, esposa del cantante, y los otros familiares y amigos que se encontraban en la reunión, corrieron hacia Rafael para saber qué era lo que había sucedido. Cuando llegaron a la puerta, se dieron cuenta que el cantante yacía tirado en el suelo al borde de la muerte.
El artista fue trasladado en el carro de un amigo a la Clínica del Caribe. Sin embargo, llegó al centro asistencial sin signos vitales.
La muerte de Rafael Orozco, de 38 años, llenó de inmenso dolor a la ciudad de Barranquilla y a todo el país. En ese entonces la gente no se explicaba cómo alguien había podido quitarle la vida a uno de los mayores exponentes del género vallenato; un hombre que con su voz y personalidad le brindó varios momentos de alegría a los colombianos.
Su familia, celebridades y otros cantantes de la talla de Jorge Oñate y Miguel Morales asistieron a su velorio y entierro. La multitud se lanzaba sobre su féretro; las calles estaban llenas de gente que quería darle la despedida a su ídolo. Finalmente fue sepultado en el cementerio Jardines del Recuerdo de Barranquilla.
Muchas fueron las preguntas que surgieron alrededor de la muerte violenta de Rafael Orozco Maestre. Después de seis años de recolección de pruebas y de recibir varias declaraciones de testigos, las autoridades determinaron que todo se trató de un “crimen pasional”.
Una nota escrita por el diario El Tiempo en 1998 dice que el fiscal Luis Felipe Colmenares concluyó que el autor intelectual del asesinato fue José Reinaldo Fiallo, alias ‘Nano Fiallo’, un temido narcotraficante de la costa que mantenía una relación con María Angélica Navarro, mujer con la que Rafael Orozco habría tenido un romance extramatrimonial.
El autor material del crimen sería Sergio González Torres, alias ‘Tato’, guardaespaldas del narcotraficante. El sujeto habría cumplido las órdenes expresas de ‘Nano Fiallo’ para quitarle la vida al ídolo musical por el “triángulo amoroso”.
Reinaldo Fiallo y González Torres fueron asesinados el 18 de noviembre de 1992 en la ciudad de Cartagena, Bolívar.