
En medio de una crisis de transporte que ha paralizado las principales ciudades colombianas, Henry Cárdenas emerge como una figura central en el debate sobre el aumento del precio del diésel.
Como presidente de la Federación de Empresarios del Transporte de Carga de Colombia (Fedetranscarga), Cárdenas ha jugado un papel crucial en las recientes protestas que han sacudido al país.
Desde el pasado viernes 30 de agosto, el Gobierno nacional de Gustavo Petro anunció un aumento significativo de 1.900 pesos en el precio del diésel (Acpm).
Esta decisión ha desencadenado un rotundo rechazo por parte del gremio de los transportadores, quienes han bloqueado las principales vías en ciudades como Bogotá, Barranquilla, Medellín y Bucaramanga. La protesta, que busca presionar al Gobierno para que revierta esta medida, ha sido liderada por Cárdenas, un conocido líder del sector.
Henry Cárdenas ha estado al frente de Fedetranscarga desde 2016, y su liderazgo en el gremio de transporte de carga no es nuevo.
En 2016, Cárdenas ya se había destacado por liderar las protestas contra el aumento del costo del combustible durante la presidencia de Juan Manuel Santos. Su experiencia en el sector es extensa, habiendo sido también gerente administrativo de Teca Transportes, una empresa dedicada al transporte de carga a nivel nacional e internacional.
A pesar de su postura públicamente independiente, Cárdenas ha mantenido encuentros con figuras políticas de la derecha colombiana, como el expresidente Iván Duque, lo que ha suscitado cierta controversia. En redes sociales, algunos críticos han cuestionado su imparcialidad, sugiriendo que sus acciones podrían tener motivaciones políticas. El activista Beto Coral, por ejemplo, ha publicado fotografías en las que Cárdenas aparece junto a políticos como Álvaro Uribe y María Fernanda Cabal, lo que ha generado debate sobre sus verdaderas intenciones.
Cárdenas también ha enfrentado escándalos en su carrera. En junio de 2021, durante el estallido social, un incidente involucró a su padre, quien estaba al volante de una camioneta negra que arrolló a una manifestante en Bogotá. El líder de los camioneros defendió a su padre, alegando que la reacción fue en defensa propia debido a una percepción de amenaza.
Este episodio ha influido en la percepción pública de Cárdenas, quien ha sido objeto de críticas y acusaciones en redes sociales.
A pesar de estos desafíos, Cárdenas sigue siendo una figura clave en las negociaciones con el Gobierno. El 3 de septiembre, la ministra de Transporte, María Constanza García, anunció un congelamiento del precio del combustible en un intento de calmar la situación.
Sin embargo, Cárdenas y los camioneros han rechazado esta propuesta, insistiendo en que el precio del diésel debe ser reducido a su nivel anterior para que cesen las protestas. Cárdenas ha advertido que las bases camioneras solo se moverán de sus bloqueos si el Gobierno accede a sus demandas, y ha subrayado la importancia de garantizar el suministro de alimentos y medicamentos en el país.
El líder de Fedetranscarga ha subrayado que la única manera de hacer sentir su presión al Gobierno es mediante bloqueos, aunque reconoce que esta medida afecta gravemente a la movilidad y la distribución en el país. “Las bases camioneras entienden que la única forma para que el Gobierno sienta que hay un paro es con bloqueos. En estos momentos, los bloqueos son intermitentes, pero cuando esto se ponga más duro, no se van a poder mover para ningún lado”, declaró Cárdenas a Infobae Colombia.
Henry Cárdenas se ha convertido en el rostro visible de las protestas contra el aumento del diésel en Colombia. Su liderazgo ha sido crucial para articular las demandas del gremio de transportadores y presionar al Gobierno para reconsiderar su decisión. Con la situación aún en desarrollo, el impacto de sus acciones en la política y economía del país sigue siendo una cuestión de gran relevancia.