El sexo tántrico viene de las prácticas del hinduismo, su filosofía se enfoca en vivir el momento presente con un estado de consciencia que vibre alto espiritualmente. Los factores materiales pasan a un segundo plano y en esta práctica sexual también lo hacen.
Este se basa en el tantra o tantrismo, este término comprende una técnica que centra corporalmente una disciplina, sin embargo, en el ámbito sexual hace referencia a los secretos que utilizan el sexo como un puente alcanzar mayor sensibilidad y se encuentran en los textos y rituales religiosos.
Pero, ¿cómo podría practicarse un momento sexual sin un enfoque completamente físico?, el sexo tántrico ve más allá de lograr un solo fin en el momento sexual, que normalmente sería el orgasmo.
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Su enfoque intenta que los individuos muevan la energía sexual utilizando cada parte del cuerpo físico y mental. No pretende explorar únicamente los genitales, sino que implementa un sexo meditativo que aparta completamente los juicios de belleza y superioridad entre quienes lo practican.
Dentro de algunos estímulos que usa el sexo tántrico se encuentra conocer el cuerpo, los primeros acercamientos incluyen la masturbación para alcanzar un amor propio que conlleve a la buena relación de entendimiento con el cuerpo de la pareja.
Existe la preparación para practicarlo y el primer paso es informarse acerca de ello, el sexo tántrico requiere de la disposición de bastante tiempo para comprenderlo y conseguir éxito en el momento de experimentarlo.
Todo lo que esté alrededor influirá en el resultado satisfactorio de los dos individuos, prepara la mente y organizar el lugar donde se hará, es importante para eliminar tensiones y distracciones.
Además, generará beneficios que a corto y largo plazo podrán gozarse. Parte fundamental del tantra es tener una buena técnica de respiración, tal como en la meditación, el sexo tántrico necesita una sincronía en la respiración propia y de la pareja para sentir que se conectan con el universo y el ‘aquí y ahora’. El ejercicio respiratorio produce más glóbulos rojos, mejor digestión, funcionamiento positivo del sistema nervioso y fortalecimiento de los pulmones.
Entonces, tener en cuenta y darle importancia al momento presente es fundamental si se quiere iniciar, mantener el contacto visual, controlar los chakras o centros de energía del cuerpo (esto se logra a través de la meditación), explorar de los sentidos tanto físicos como sentimentales y jugar con los ritmos de penetración y caricias durante la relación sexual, darán el máximo placer en los individuos.
En conclusión, el tantra permite una mayor libertad en las parejas, incentiva el amor propio y asimismo, el que es transmitido y fusionado entre dos o más, generando así una experiencia que va más allá de lo efímero.