Este martes se dio inicio a la operación de las nuevas zonas de parqueo pago en Bogotá, que estarán habilitadas en distintas partes de la ciudad y serán administradas por los “facilitadores”, quienes estarán encargados de brindar información a los usuarios y contarán con el apoyo del nuevo cuerpo de agentes civiles de tránsito que podrá emitir comparendos a quienes no paguen de forma anticipada el servicio.
El piloto de este programa estará a cargo del Terminal de Bogotá y funcionará de forma gratuita durante dos semanas, siendo implementado únicamente “en la localidad de Chapinero entre la carrera 11 y la Autopista Norte, desde la calle 76 hasta la calle 94”, según indica la Alcaldía en un comunicado.
“La primera zona contará con 1.000 cupos y progresivamente se incorporarán nuevas zonas en diferentes puntos de la ciudad con la proyección de habilitar en total 13 mil cupos de estacionamiento al finalizar el 2022”, agregó.
De igual manera, se sabe que, aunque las figuras de agentes civiles estarán habilitados para poner comparendos y hasta para inmovilizar un vehículo que se encuentre mal parqueado, durante esta primera fase se llevará a cabo una dinámica pedagógica en la que no tendrá lugar ningún tipo de cobro. No obstante, tras el paso de este periodo, empezará a ser cobrado el servicio de “uso de la vía pública” (bien sea en efectivo o por medio de una aplicación móvil).
Lo primero que hay que saber es que para explicar el sistema estarán los llamados facilitadores en cada uno de los puntos de parqueo, que tendrán la tarea de divulgar todo tipo de información que los usuarios requieran, así como de recibir el pago de quienes decidan cancelar la tarifa en efectivo. Hay que tener en cuenta que para poder parquear, antes se tendrá que identificar una zona habilitada para tal fin por medio de una señal de tránsito especial y tener en cuenta que dicho monto será cobrado de forma anticipada cada 30 minutos.
Uno de los puntos polémicos de la iniciativa parte de que en caso de que la persona no renueve a tiempo el pago de la tarifa tras exceder los 30 minutos, los agentes de tránsito pueden proceder con la inmovilización del vehículo por medio de un “cepo”, que es básicamente un artefacto que se instala en una de las llantas para impedir la puesta en marcha.
Las cosas así, los usuarios que sean inmovilizados tras exceder su tiempo deberán pagar una multa diferencial para carros y motos. En caso de los automóviles dicho monto será de 90 mil pesos y para motos de 63 mil, además del pago del tiempo adicional utilizado.
Este tema ha generado un gran malestar entre varios ciudadanos que se preguntan por aquellos vacíos tales cómo: ¿qué pasará con las personas que hagan uso de las zonas de parqueo y no tengan habilidades digitales para el uso de la app? ¿Debe entonces una persona que paga en efectivo pagar preventivamente varias fracciones de servicio anticipadas? Todavía más importante: ¿se les devolverá el dinero a las personas que no hagan uso del tiempo que hayan pagado?
Por otro lado, eso sí, cabe mencionar que el dinero recaudado en dichos puntos será destinado al Fondo de Estabilización de Tarifa del Sistema Integrado de Transporte Público, así como al mantenimiento de la malla vial y a la implementación de nuevas Zonas de Parqueo.
Polémica por el regreso de los "chupas"
Más allá de las zonas de parqueo y de las interrogantes que suscita esta medida que, según la Alcaldía, busca “contribuir con el ordenamiento del espacio público al tiempo que incentivar el uso del transporte público y medios de transporte sostenibles”, uno de los puntos que más revuelo ha generado es el regreso de los “chupas” o agentes de tránsito civiles, una figura extinta en la capital desde hace ya varios años.
De acuerdo con el comunicado de la Alcaldía, estos nuevos funcionarios “verificarán, controlarán y fiscalizarán a los conductores y sus vehículos que estacionen en lugares prohibidos”, siendo autorizados para la aplicación de comparendos (que para el parqueo en sitios prohibidos es de $447.700) y la inmovilización de los vehículos con grúas de la Secretaría Distrital de Movilidad en caso de que el conductor no esté presente.
Otro de los puntos polémicos radica en que, lejos de adoptar responsabilidades, la medida establece una relación servicio-cliente del Distrito con los ciudadanos, en la cual no adquiere ninguna responsabilidad sobre los vehículos. Específica entonces el documento divulgado por la Alcaldía que todo daño o robo deberá ser manejado como cualquier otro incidente ocurrido en la vía pública.
“Es importante destacar que las ‘Zonas de Parqueo Pago’ cobran por el uso del espacio público y no son un contrato de depósito como ocurre en los Estacionamientos Fuera de Vía. Es decir, el valor pagado por el usuario no incluye el cuidado del vehículo. Únicamente corresponde al uso como estacionamiento en una vía pública”, asegura.
En ese orden de ideas, agrega el comunicado, ante cualquier eventualidad “el ciudadano podrá reportar a las autoridades de tránsito, quienes establecerán las responsabilidades de los implicados” o reportar a las autoridades en caso de robo.
No obstante, con tan solo un día de puesta en marcha, aún queda esperar para ver cuáles serán los resultados que tendrá esta iniciativa en la práctica. Aunque eso sí, también hay que destacar la huella positiva que deja en materia social: identificación de los “cuidadores de carros” informales para su futura vinculación, los incentivos de descuento para vehículos con energías limpias, entre otras.