El 9 de septiembre es una fecha que pocos bogotanos olvidan por el inicio de las protestas en rechazo del asesinato del ciudadano Javier Ordoñez a manos de la Policía Nacional. Unas revueltas que, tras tres días de duración, terminaron con la muerte de 13 ciudadanos en los enfrentamientos con la fuerza pública.
Precisamente, una de las que se manifestó en homenaje a las víctimas fue la alcaldesa Claudia López, asegurando que siente “como propio el dolor de las familias de la tragedia ocurrida del 9 al 11 de septiembre en Bogotá”. Algo que no ha caído muy bien en ciertos sectores como el uribismo, que han considerado su posición como un ataque a la Policía.
En una alocución posterior, López, al borde del llanto, le pidió al presidente Iván Duque acelerar el proceso de reforma estructural a la Institución, pidiendo también a la Fiscalía y a la Procuraduría “que se adelanten con celeridad las acciones que sean necesarias y pertinentes para culminar las actuaciones penales y disciplinarias sobre los hechos violentos que se presentaron”, como reza un comunicado de la Alcaldía.
“No se asesina a ocho jóvenes en Bogotá, a tres en Soacha, en una sola noche, por casualidad o por azar. No se agrede la humanidad de cientos de jóvenes en medio de movilizaciones o protestas, por casualidad o por azar. Es urgente hacer una reforma estructural a la Policía Nacional que la dismilitarice, que la saque de esas viejas herencias y prácticas del conflicto armado”, aseguró López en su discurso.
Vea la conferencia completa de Claudia López (empieza a partir del minuto 11):
La petición de Claudia López al Fiscal Francisco Barbosa y a la procuradora Margarita Cabello, se dieron a través de dos cartas (publicadas por la Alcaldía), en las que la mandataria bogotana asegura que no han sido fructíferas las investigaciones penales por los asesinatos y violaciones a los Derechos Humanos en el marco de las protestas, al tiempo que “solo se han formulado imputaciones de cargos a tres miembros de la Policía Nacional”.
Mismos miembros que, según la alcaldesa, no han sido separados de sus cargos en la institución y gozan de total libertad.
Rifirrafe entre Cabal y Claudia López
Lo afirmado por la alcaldesa López con motivo del 9 de septiembre no ha sido bien recibido por un buen número de sectores y fuerzas políticas que asimilaron sus comunicaciones como un ataque a la Policía Nacional. Una de las voces que defendió esta idea fue María Fernanda Cabal, quien le dijo a la mandataria que era una “desagradecida” y aseguró que "si los policías disparan, no es por deporte".
Una comunicación que por supuesto tuvo detractores, aunque también encontró varios aliados uribistas que rechazaron igualmente las palabras de Claudia López y el manejo que ésta le ha dado al control del orden público en Bogotá.
Dentro de estas voces contrarias también apareció el esposo de la senadora del Centro Democrático, el presidente de Fedegan, José Félix Lafaurie, quien trinó que “no esperaba más de Claudia López. Siempre está atacando y menospreciando a la Policía de Colombia. Le entregó la ciudad a los vándalos y a la delincuencia común”.
Otro que apareció fue el exviceministro de Justicia, Rafael Nieto Loaiza, quien considera que “no es justo culpar a la Policía por los enormes problemas de seguridad que está sufriendo la capital” e instó a la alcaldesa a “asumir responsabilidades”.
Sin embargo, es importante mencionar que los detractores de la alcaldesa no llegaron solo por parte del uribismo, sino que también de personas que le reprochan lo que consideran un doble mensaje: “mano dura con los manifestantes y luego homenaje a las víctimas de la brutalidad policial”.
Otro de los puntos que la gente le critica a la alcaldesa es que ante los crecientes casos de inseguridad en la capital colombiana, haya enfocado sus esfuerzos en atacar y estigmatizar a la población venezolana con medidas como su cuadrante contra delincuentes migrantes (que ya fue descartado).
Una tras otra, parece que la Alcaldía no logra atinar comunicación alguna en ningún bando de la política nacional. Alocuciones dispares que se acomodan a la agenda del día, algunas desde el oficialismo y el respeto a las instituciones, mientras otras se enfocan en el lado humano y el homenaje a las víctimas de la presunta violencia estatal.