La suspensión temporal del alcalde de Medellín, Daniel Quintero, ha generado una verdadera tormenta política en Colombia. En medio de todo ello, se desató un rifirrafe entre el concejal de Bogotá Julián Sastoque y el senador del Pacto Histórico Armando Benedetti, quienes se echaron en cara algunas posiciones políticas del pasado que en el calor del momento podrían resultar contradictorias.
Todo comenzó cuando, a lo mucho unas 12 horas después de que el mandatario paisa subiera un video apoyando la candidatura de Gustavo Petro, la procuradora Margarita Cabello sorprendió en la noche del martes con el anunció de su suspensión por “presunta y reiterada intervención en actividades y controversias políticas”.
Al tiempo, fueron sancionados provisionalmente otros tres funcionarios: Andrés Fabián Hurtado Barrera (alcalde de Ibagué), Gustavo Adolfo Herrera Zapata (concejal de Calarcá, Quindío) y Grenfell Lozano Guerrero (personero de Nátaga, Huila). Una decisión que fue ampliamente criticada desde el partido de Petro, especialmente por parte de Armando Benedetti, quien le manifestó su solidaridad y apoyo a Daniel Quintero.
“Siempre me he opuesto a las acciones administrativas contra las personas elegidas popularmente como Daniel Quintero. Toda mi solidaridad y apoyo”, manifestó a través de Twitter.
Sin embargo, el mensaje no parece haber calado en el concejal Julián Sastoque, quien no dudó en recordarle al senador que, a pesar de su rechazo a las acciones de la procuradora Cabello, en su momento éste le habría dado su apoyo para alcanzar el cargo que ostenta.
No obstante, el tema estuvo lejos de quedarse así, ya que el senador, ficha importante de la campaña de Gustavo Petro, decidió responderle a Sastoque. Lejos de los insultos, Benedetti se limitó a publicar un trino de 2018 en el que el concejal aseguraba que “jamás” volvería darle un voto a Sergio Fajardo luego de los resultados de las elecciones presidenciales.
Entre otras cosas, Sastoque habría señalado que parte de la responsabilidad por el triunfo de Iván Duque, apuesta del uribismo para las contiendas de hace cuatro años, era de Fajardo. Al igual que el petrismo, el concejal parecía sumamente molesto por la falta de decisión del político tras la primera vuelta, pues cabe recordar que una gran parte del electorado llegó a esperar que este se decantara por Gustavo Petro.
“De esta segunda vuelta y general, de las elecciones, puedo decir que JAMÁS le daré un voto a Sergio Fajardo. Tengo mis razones para pensar que estos resultados son en parte responsabilidad suya. Ojalá en 4 años queden ballenas para ver”, señaló Julián Sastoque.
Todo esto resulta tremendamente paradójico ya que, en este 2022, Sastoque otra vez realiza campaña activa por el candidato que juró “jamás” volver a apoyar. De hecho, se ha convertido en uno de esos jóvenes infaltables en las manifestaciones, presentaciones y giras de Sergio Fajardo.
A su vez, recordar que recibe el apoyo de senadoras como Angélica Lozano, que en su momento lo felicitó por su “claridad y madurez política” por haber apoyado a Carlos Amaya en las pasadas consultas y ahora apostarle a Fajardo. Esto porque, cabe mencionar, ellos representan a una gran base verde que continúa apoyando al ex gobernador de Antioquia como la opción de centro más adecuada.
No obstante, no deja de ser un momento curioso en medio del acalorado momento que se vive por la suspensión de Quintero, que desde este sector del verde ha sido vista desde una perspectiva dual: por un lado, rechazan la “cooptación de los organismos de control” (en palabras de Fajardo) y que no se sancionen a otros funcionarios que igualmente habrían participado en política; mientras que por otro, no están de acuerdo con que un alcalde en función realice propaganda a favor de un candidato a la presidencia.
Una visión que comparte Sastoque, quien señaló que “se puede cuestionar al mismo tiempo la participación descarada de Quintero en política y la actuación selectiva e incompetente de la Procuraduría”. Una muestra de que en cuatro años pueden cambiar muchas cosas y de lo dinámica que puede llegar a ser la política.
