La exministra y ex magistrada de la Corte Suprema de Justicia Margarita Cabello Blanco fue elegida el año pasado como procuradora general de la Nación, el próximo viernes 15 de enero se posesionará y le quedarán varios procesos disciplinarios que se iniciaron durante la administración del saliente procurador Fernando Carrillo.
Entre los procesos más mediáticos se encuentra el caso en contra del saliente director de la Policía, el general Óscar Atehortúa, por presuntas irregularidades relacionadas con el proyecto de viviendas fiscales, en el municipio de San Luis, Tolima.
Del mismo modo, se estrenará con la audiencia en contra del suspendido senador Eduardo Pulgar, del Partido de la U, quien es investigado por presuntamente intentar sobornar a un juez de Usiacurí, Atlántico, para, al parecer, favorecer una decisión judicial en medio del sonado caso Unimetro.
Como también asumirá el caso contra el ex gerente del sistema de medios públicos Radio Televisión Nacional de Colombia, Rtvc, Juan Pablo Bieri, por presunta extralimitación de funciones, abuso de autoridad, censura y posible violación a los derechos de libertad de expresión y opinión.
Cabello estuvo en el Ministerio de Justicia desde el 16 de mayo de 2019, luego de la renuncia de Gloria María Borrero. Ese cargo generó la mayoría de críticas en contra de la ternada, particularmente porque ella estuvo a cargo de la cartera durante el proceso de solicitud de extradición de Salvatore Mancuso.
Esa extradición se encuentra enredada en la diplomacia colombiana con el Departamento de Estado de Estados Unidos, debido a que al menos tres solicitudes han sido rechazadas, una cuarta presentó errores por falta de traducción de los documentos, y un juez norteamericano dio concepto favorable de enviar al exlíder de las AUC a Italia, de donde es nacional.
Ahora, los cuestionamientos surgen porque será la Procuraduría, en cabeza de la exministra de Justicia, quien deba asumir la investigación de posibles irregularidades en la solicitud de extradición al país de Salvatore Mancuso.
Margarita Cabello ha tenido sus últimos puestos asegurados. Pasó de la Sala Civil de la Corte Suprema de Justicia, de donde salió el 19 de mayo de 2019 para asumir la dirección del Ministerio de Justicia, nombrada por el presidente Duque; luego salió de este para aspirar a la Procuraduría, en donde recibió los apoyos de los partidos mayoritarios y finalmente obtuvo la votación en el Senado de la República, este 27 de agosto, con un total de 83 votos a favor.
No obstante, su elección para la Procuraduría ha generado dos demandas de nulidad. La primera fue presentada a finales de noviembre, argumentaba que Cabello estaba inhabilitada porque el año previo había fungido como ministra de Justicia. La Sección Quinta del alto tribunal determinó negó la medida cautelar de suspensión de los efectos jurídicos de la elección. La segunda fue radicada en diciembre e indicaba que se presentó una “desviación de poderes” por parte del Senado al elegirla como nueva jefe al Ministerio Público puesto que se desconoció el papel que ejerció en el mismo Congreso como Ministra de Justicia.
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Cabello es una abogada barranquillera de la Corporación Universitaria de la Costa, especialista en Derecho de Familia de la Universidad Externado de Colombia en convenio con la Universidad Autónoma de Bucaramanga y Especialista en Derecho Procesal Civil de la Universidad Externado de Colombia en convenio con la Universidad de Cartagena y candidata a Maestría en Derecho Procesal Contemporáneo en la Universidad de Medellín.
Su vida en la Rama Judicial inició como juez penal municipal de Sabanalarga, Atlántico, juez de menores y juez civil del circuito de Barranquilla hasta llegar a la magistratura en la Sala Civil-Familia del Tribunal Superior de Barranquilla, donde estuvo durante 19 años. Salió a la luz pública en el 2009 cuando el entonces presidente Álvaro Uribe la incluyó en la terna para Fiscal General de la Nación, luego de la renuncia de una de las candidatas. En esa ocasión estuvo muy cerca de quedar elegida.
La Procuraduría no le es ajena a Cabello, estuvo allí durante tres años, de 2009 a 2012, cuando se desempeñó como procuradora delegada de la Sala Disciplinaria de la Procuraduría General de la Nación. Por ese cargo, que también le significó protagonismo, la actual procuradora es cercana al exprocurador Alejandro Ordóñez, ahora embajador de Colombia ante la Organización de Estados Americanos.
Con Cabello en la Procuraduría General de la Nación, el presidente Iván Duque ha logrado posicionar a sus candidatos más cercanos en la Fiscalía, con Francisco Barbosa, y en la Defensoría del Pueblo con Carlos Camargo.
