El juez primero del circuito penal de Bogotá resolvió declarar a la exministra de las TIC, Karen Abudinen, como víctima del entramado de corrupción en el que el Estado Colombiano perdió $70 mil millones de pesos en un contrato de conectividad en el que también se vio involucrado el cuestionado empresario Emilio Tapia.
Según señaló el togado, la ministra habría sido afectada de manera intangible en su buen nombre, lo que le habría traído consecuencias negativas en su vida personal. Cabe recordar que Abudinen ya había solicitado ser declarada como víctima dentro del proceso que se adelanta por Centros Poblados y con el que se truncó el sueño de conectividad digital para cientos de niños, especialmente en la zona norte del país.
Karen Abudinen aseguró que por cuenta de este escándalo, en el que tuvo que renunciar a su cargo como cabeza del ministerio TIC, ha tenido muchas dificultades para encontrar un nuevo empleo y esto le ha acarreado tener que buscar ayuda para su salud mental.
“Concretamente, yo a hoy, mi carrera profesional y mi persona se ha visto truncada. Tengo que ir al psicólogo”, aseguró Abudinen días atrás revelando también que en medio del escándalo por el millonario desfalco, tuvo que enfrentar también el fallecimiento de su progenitora, quien perdió la vida a causa del COVID-19.
“Si ellos no hubieran entregado esos documentos falsos a los cuales ellos sabían yo no estuviera pasando por todas estas cargas afectivas, profesionales y personales", agregó Abudinen.
Según se conoció, las pretenciones de la exministra no son de naturaleza económica, sino que busca que se limpie su buen nombre y se deje claro que ella no tuvo nada que ver en el entramado de corrupción.
“Son muchos los procesos que me ha tocado asumir sin necesidad porque yo nunca he cometido ningún acto (...) Quiero también repetirle a todos los apoderados que yo no estoy por intereses económicos. Eso es supremamente importante. Mi condición de víctima no se basa para que luego me hagan un resarcimiento económico. Mi condición de víctima se trata porque a mi me hicieron un daño real, concreto, visible. Incluso las redes sociales a día de hoy no paran de presionar frente a una situación en la que jamás he estado o he cometido”, ha aclarado en reiteradas oportunidades la exfuncionaria del gobierno Duque.