Ingrid Betancourt, excandidata presidencial secuestrada por las Farc entre 2002 y 2008, uno de los rostros más representativos del conflicto armado colombiano, participó en un conversatorio de la Universidad Externado de Colombia en el que se refirió a la paz, las víctimas, el dolor, el perdón y el momento político que vive Colombia.
En medio del evento fue interrogada por su opinión sobre diferentes líderes políticos colombianos como Álvaro Uribe, Juan Manuel Santos, Gustavo Petro e Iván Duque, y pese a señalar la incomodidad que le generan ese tipo de preguntas, expresó lo que piensa de cada uno de ellos.
En primer lugar se refirió al expresidente Juan Manuel Santos, con quien recientemente lanzó 'Una conversación pendiente', un libro moderado por Juan Carlos Torres en el que hablan de sus vivencias durante la guerra contra las Farc.
"Puede que no sea objetiva porque es una persona que quiero mucho. Fue mi jefe en el Ministerio de Comercio, vi como trabajaba, me sacó de la selva, le debo mi vida y la libertad y lo admiro por la paz que logró para Colombia", expresó Betancourt.
Sobre el expresidente Uribe confesó que "En su momento supo entender lo que necesitaba Colombia, fue el único que lo hizo, cuando se da la campaña presidencial del 2002 todos estábamos tratando de reflexionar dentro de las negociaciones del Caguán, y estábamos fuera de la realidad porque ni las Farc querían la paz ni el Gobierno quería la paz".
Y agregó: "El Uribe que me mantiene secuestrada, en el sentido de que no quiere negociar, debo decir que siempre tuve una admiración porque sentía que él estaba haciendo lo que se necesitaba hacer. Después se desdibujó y creo que lo que más lo desdibuja es no haber entendido que era el momento de la paz. Para mi es una oportunidad perdida".
Con respecto al senador y aspirante a la Presidencia, Gustavo Petro, señaló que pese a compartir muchos ideales, siente que no es el mismo de 2018, razón por la que no se ha acercado a él de cara a 2022.
"He sido afín a él. Admiro mucho su capacidad de investigación y denuncia, me parece que es un hombre muy valiente, pero creo que el Gustavo Petro de hoy no es el mismo de 2018. Pienso que ha habido un desliz y es el de pensar que el fin justifica los medios, cuando se llega a ese punto la diferencia entre los dos extremos es inexistente"
Betancourt explicó que, desde su punto de vista, "Con tal de llegar al poder se mandan mensajes contradictorios, se reciben personas que le han hecho mucho daño al país con las cuales supuestamente va a entrar a gobernar y para mí eso es un problema, porque lo que yo quiero es que llegue gente a gobernar a Colombia que no este comprometida con el saqueo organizado sistemático del país a beneficio de unos grandes ricos y, cambiar estos círculos restringidos de unos nombres a otros nombres es exactamente lo que tenemos que evitar, entonces en relación a Gustavo tengo preocupación, porque siento que en él hay mucho de bueno, pero es que el ansia de poder es algo que hay que tener mucho cuidado".
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Finalmente, la excandidata presidencial se refirió al presidente Duque. Afirmó que es una buena persona, pero que el círculo que lo rodea no ha hecho un buen trabajo y dan cuenta de la desconexión del Gobierno con la gente, y cuestionó la actitud con la que ha enfrentado los problemas.
"A pesar de las buenas intenciones yo creo que él tiene un gran enemigo que es su ego y no es el ego el enemigo de Iván Duque, es el enemigo de todos, el ego es lo que no nos permite ir al otro, lo que nos encierra, lo que nos deforma la realidad, lo que nos hace tener actitudes contraproducentes", dijo Betancourt, quien finalizó diciendo que a Duque "Le quedó grande la Presidencia".