Desde su llegada al Gobierno, el presidente Gustavo Petro ha hablado frecuentemente de la transición energética y su importancia para el equilibrio ambiental. En Egipto (Cop27), en Nueva York (Asamblea de la ONU) y en su posesión presidencial, Petro ha mantenido en el primer renglón de su discurso todo lo referente al cambio climático. La transición energética y el progresivo abandono de las prácticas extractivistas son algunos de los temas más importantes en la agenda del Ejecutivo de cara al año entrante. Pero, ¿qué acciones se han tomado al respecto en los primeros 100 días del autodenominado ‘Gobierno del Cambio’?
En una reciente rendición de cuentas que hizo el Ministerio de Minas y Energía a través de un informe se establece lo que será el inicio la transición energética con una mesa de diálogo de seis meses. La ministra Irene Vélez será quien lidere esta etapa y quien determine la hoja de ruta de todo el proceso.
Diálogos para la transición energética
El Gobierno ha señalado que tales diálogos deberán llevarse a cabo en los departamentos donde hay mayor concentración de prácticas mineras y petroleras. Se evaluará la cualificación laboral de los empleados del sector minero-energético, así como se tendrá en cuenta el enfoque “de género y étnico” por el que se han guiado los funcionarios delegados para el proceso.
Se ha dejado claro que en los diálogos deben participar todos los actores relacionados con el sector: comunidades, empleados, empresarios, gobiernos locales, sindicatos, usuarios y comerciantes.
“Esta transición implica cambios estructurales en el sistema energético del país para la sustitución gradual de las fuentes de energía fósil, mediante la expansión de las energías renovables; implica el paso de una economía extractivista a una economía productiva”, señalan.
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Energía solar y eólica: ¿la punta de la lanza?
Uno de los objetivos del Gobierno es asegurar un crecimiento del 73 % en la producción las energías eólica y solar. Asimismo, el propósito de la actual administración es la generación de hidrógeno verde y una estrategia complementaria que serviría como impulso en todo el proceso: la integración a la Red Energética de América Latina, que tiene 4.500 megavatios de capacidad instalada.
Para el cumplimiento de tales metas, el Gobierno ha planteado una serie de programas que, a largo y mediano plazo, le darían estabilidad al proyecto de transición energética. ‘Comunidades y Distritos Energéticos’ incorporan: Estallido de la energíasolar, Estallido de la energía eólica y Estallido de la bioenergía.
A lo aneterior se sumará “la creación del Instituto Nacional de Transición Energética y el programa de Fomento de la industria nacional asociada a las tecnologías de las energías renovables a través del desarrollo de componentes y prototipos industriales”.
Habrá financiación internacional
A través del MinMinas, el Gobierno suscribió con el Banco Europeo de Inversiones (BEI) una ‘Declaración Conjunta para la Transición Energética Justa en Colombia’. Con ello se busca que el hidrógeno verde crezca a pasos agigantados, ganándole tiempo a todo el proceso de transición energética en el país.
En la costa Caribe, donde desde hace muchos años la comunidad ha reportado fallas en el servicio de energía, se anunciaron ayudas a la población, las cuales, a su vez, están relacionadas con prácticas más amigables con el medio ambiente
En los siete departamentos de la región Caribe se entragarán incentivos económicos para la sustitución de neveras e iluminación ineficientes por soluciones solares fotovoltaicas. Habrá más de 220.000 beneficiados gracias a un crédito por 34,5 millones de dólares asignado por la Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
KienyKe.com habló con Arturo Luna, ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, quien dijo que desde su cartera se trabajará en energía sostenible, eficiente y asequible. Señaló, sin embargo, que la transición energética puede representar para el país un nuevo renglón en la industria, lo que permitirá que empresas colombianas le aporten al país mientras crecen.
“En Colombia hay muchos avances tecnológicos que le están apuntando a eso. Hay universidades que están desarrollando páneles solares. Hay algunos programas que, de hecho, están siendo financiados por el ministerio. Así no dependeríamos de países como China. Todo puede desembocar en un sector energético sobre el que ya hay avances. Esta es una oportunidad real que tiene el país y hay que aprovecharla”, expuso el funcionario.
De esta manera, el Gobierno Petro se prepara para estructurar los diálogos con las comunidades y alistar toda la logística y financiación que requiere la transición energética.
