El Centro Democrático, el partido que lidera el expresidente Uribe Vélez, se declara perseguido por el Fiscal General de la Nación, Eduardo Montealegre, a propósito del llamado a declarar que -por radio- le hizo a su último candidato presidencial Oscar Iván Zuluaga.
Tres senadores de esa agrupación política, los más caracterizados y conocidos (José Obdulio Gaviria, Paloma Valencia y Alfredo Rangel) “se despachan” contra el alto funcionario.
José Obdulio Gaviria
En Venezuela un magistrado que huyó de la tiranía chavista y se refugió en los Estados Unidos relataba cómo el presidente Chávez y la fiscal se reunían los lunes en la mañana para tramar procesos con falsos testimonios contra opositores.
El Fiscal General de Colombia está en un proceso idéntico, que solo tiene recordación en los regímenes tiránicos como Stalin y Hitler. Eso en lenguaje internacional tiene nombre propio, se llama procesos farsa, procesos políticos contra partidos políticos revestidos de las formalidades legales.
El Fiscal General, ávido de poder, contratista del Estado, contratista de organizaciones como por ejemplo Saludcoop, donde hizo y deshizo, simplemente actúa total y absolutamente por fuera de cualquier límite constitucional o legal. Él está remedando a Chávez o a Stalin.
Paloma Valencia
Creo que la pregunta que se tiene que hacer el pueblo colombiano, y que se está haciendo la opinión pública, es ¿por qué los únicos judicializados en este país son los uribistas? Cuando hay tantos crímenes cometiéndose en el país, ¿por qué el Gobierno y la Fiscalía General se encargan a perseguir simplemente a la oposición política?
El hecho de que la Interpol haya vuelto a negar la circular roja en contra de la doctora María del Pilar Hurtado, diciendo que se trata de una persecución política, racial o religiosa, muestra la envergadura del problema que enfrenta hoy Colombia en torno de la justicia politizada.
El fiscal Montealegre no solo nos ha tratado de nazis, sino que el Presidente de la República nos ha tildado de "mano negra" sugiriendo que el Centro Democrático y quienes hacemos oposición a su gobierno y a su proceso de negociación con La Habana, somos guerreristas y hasta delincuentes.
Que un Fiscal General de la Nación que recibió más de mil millones de pesos en contratos de parte de la Presidencia de la República, no debe utilizar la Fiscalía General de la Nación para emprender la persecución en contra de la oposición política que representa el Centro Democrático.
El Fiscal General de la Nación está utilizando el cargo para hacer política, lo que va en contra de la democracia colombiana. Ya lo dijo también el Tribunal Superior de Cundinamarca cuando le llamó la atención a propósito de la manera como manipuladamente utilizó el caso del hacker con propósitos políticos durante la campaña electoral.
Colombia tiene que ponerse la mano en el corazón y hacer un alto en el camino. No se trata de si son uribistas y comparten las tesis de este partido, se trata de la defensa de una democracia que no puede ponerse al servicio de los intereses de quienes ocupan el poder coyunturalmente.
Siento mucho dolor de que en Colombia la Fiscalía General de la Nación y el Gobierno Nacional estén utilizando las instituciones para perseguir judicialmente la oposición política, porque el ánimo que tiene el Gobierno Nacional es arrinconar, y llevar prácticamente a la cárcel al Centro Democrático para después ofrecerle una justicia transicional y obligarlo a aceptar la impunidad para el grupo narcoterrorista FARC.
Alfredo Rangel
El señor fiscal está empeñado en una persecución política contra el Centro Democrático, contra el partido de oposición. Algunos uribistas han salido del país ante falta de garantías y ante montajes de los que han sido víctimas por parte de la justicia colombiana. Al parecer tampoco hay garantías para algunos de estos nuevos implicados, y por eso no sería de extrañar que optaran por el camino del exilio y del refugio político en otros países.
Lo cierto es que en Colombia ya hay muchos visos de chavismo, la falta de garantías para el Centro Democrático al que no se le dejó ni siquiera tener el nombre que había escogido, y ese derecho le fue negado por el Consejo Nacional Electoral. En Colombia hay muchos vicios, muchas expresiones del chavismo venezolano.
El fiscal es un actor político y por eso hace esos anuncios para lograr efectos políticos, y a renglón seguido se niega a presentarle a los eventuales acusados las pruebas y las acusaciones. Nos pone en un ambiente muy estalinista, donde los acusados no van a tener posibilidad de defenderse de las acusaciones porque no conocen las acusaciones ni las pruebas con las que los están acusando.
El uribismo ataca al fiscal Montealegre
Mié, 21/01/2015 - 11:15
El Centro Democrático, el partido que lidera el expresidente Uribe Vélez, se declara perseguido por el Fiscal General de la Nación, Eduardo Montealegre, a propósi