Durante una sesión del Consejo de Derechos Humanos de la
Organización de las Naciones Unidas (ONU), varios representantes de los países miembros boicotearon el discurso del canciller de Venezuela,
Jorge Arreaza, apenas subió al podio.
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Arreaza es el representante de su país ante la organización quien, además, es afecto al gobierno de
Nicolás Maduro, razón por la cual los demás gobiernos presentes decidieron dejar la sala pues, consideran al actual gobierno venezolano como una dictadura.
De acuerdo a medios internacionales, esta acción había sido coordinada previamente por todos los países miembros del Grupo de Lima, quienes en reiteradas oportunidades han dado su respaldo y reconocimiento a
Juan Guaidó como presidente interino del país.
https://twitter.com/Sandra_Acta/status/1100784429528682501
Tras este hecho,
Arreaza no se detuvo y continuó su discurso, durante el que dijo que en la frontera con Colombia se observan "operaciones con bandera falsa detrás de las cuales está Estados Unidos".
En entrevista concedida al medio venezolano VTV, el canciller explicó que desde el gobierno de Maduro están buscando lograr concretar un encuentro entre el jefe de Estado del chavismo y el presidente estadounidense, Donald Trump, en pro de la paz.
"Volvemos a plantear el camino del diálogo con EE.UU., que se reúna el presidente Trump con Maduro (...) Trabajemos en las coincidencias, y el diálogo entre los venezolanos y las venezolanas", dijo ante una posible reunión entre ambos líderes.
Por otra parte, el representante ante las Naciones Unidas aseveró que "el relator especial para el orden democrático de la ONU sugirió que Venezuela podría llevar a los EE.UU. a la Corte Penal Internacional". Argumentando que la medida podría basarse "en los efectos nocivos del bloqueo", pues sostiene que desde Washington se gesta esta acción contra el país sudamericano.