El turismo espacial podría crecer significativamente en los próximos años debido a nuevas tecnologías y capacidades, según declaró la directora de la Oficina de Naciones Unidas para Asuntos del Espacio Exterior, Simonetta Di Pippo.
"Está claro que con nuevas tecnologías y capacidades, el turismo espacial podría convertirse en un mercado en sí mismo y crecer en los próximos años", dijo Di Pippo a la agencia Sputnik.
Recordó que el turismo espacial no es un fenómeno nuevo, dado que varios turistas ya viajaron a la Estación Espacial Internacional (EEI), en particular, a bordo de la nave rusa Soyuz.
Di Pippo espera que este tipo de vuelos se utilicen para realizar experimentos en condiciones de microgravedad.
Al contestar a la pregunta sobre las reglas de seguridad para las compañías del turismo espacial, subrayó que "todas las empresas deben cumplir con las normas internacionales".
"Eso significa que para volar tienen que obtener una licencia de sus autoridades", precisó.
Estados Unidos, añadió, como todos los demás países, debe garantizar que se respeten todos los requisitos y tratados, como el Derecho espacial internacional, antes de emitir licencias.
Los viajes de turismo espacial
Este año dos empresas privadas de Estados Unidos comenzaron a realizar vuelos suborbitales tripulados: Virgin Galactic de Richard Branson y Blue Origin de Jeff Bezos. El año pasado, la compañía SpaceX de Elon Musk comenzó vuelos tripulados regulares a la EEI en la nave espacial Crew Dragon.
Una verdadera carrera espacial entre los hombres más ricos del mundo, que podría derivar en que dentro de unos años sea posible la idea de vacacionar en el espacio, teniendo para ello además distintas alternativas.
El último de estos vuelos fue realizado en julio por el multimillonario Jeff Bezos, quien viajó al espacio con la nave espacial desarrollada por su empresa Blue Origin.
Acompañando a Bezos, en el vuelo estuvieron su hermano Mark Bezos, la aviadora estadounidense de 82 años, Wally Funk y Olivier Deamen, de 18 años, hijo del director ejecutivo de Somerset Capitals Partner. Precisamente, tras esta hazaña, Daemen y Funk quedaron inscritos en la historia como los astronautas de menor y mayor edad en viajar al espacio.
La nave espacial New Shepard, desarrollada por la compañía Blue Origin y que transportó con éxito a la tripulación de cuatro personas, fue lanzada desde Texas, EEUU, y se elevó a una altitud de 107 kilómetros. También cabe anotar que este fue "el primer vuelo sin piloto" de la historia.
Una semana antes, el multimillonario Sir Richard Branson se convirtió en pionero de este campo, tras el viaje, por primera vez en la historia, de una nave (la VSS Unity) con tripulación completa en la cabina, incluidos dos pilotos y cuatro especialistas.
Uno de los principales objetivos de la misión Unity 22, como se le denominó al viaje de Branson, fue evaluar las experiencias que vivirán los futuros turistas espaciales, incluidas las condiciones de la cabina, la comodidad de los asientos, la sensación de ingravidez y las vistas de la Tierra desde la nave.
El VSS Unity voló a 80.000 metros sobre la Tierra y finalmente apagó el motor a fin de que los tripulantes pudieran experimentar varios minutos de ingravidez y disfrutar de las vistas panorámicas de la Tierra.
Aunque Bezos queda por ahora en el segundo lugar de esta carrera espacial, Blue Origin asegura que es mejor que su competencia porque la nave New Shepard cruzó la frontera del espacio a una altitud de 100 kilómetros.
