Este domingo Venezuela vive las elecciones parlamentarias para elegir a los nuevos miembros de la Asamblea Nacional, unos comicios que han sido cuestionados por varios gobiernos del mundo y que tendrá como veedores a amigos personales de Nicolás Maduro y representantes de la izquierda latinoamericana.
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Tal como lo anunció el canciller del régimen bolivariano Jorge Arreaza, las elecciones tendrán veedores internacionales como la ex senadora colombiana Piedad Córdoba, el ex presidente de Bolivia Evo Morales y el ex mandatario de Ecuador Rafael Correa. Todos representantes del ascenso de la izquierda latinoamericana a inicios del siglo XXI y cercanos a Hugo Cháves, así como partidarios del gobierno de Maduro.
“Canciller Jorge Arreaza sostuvo un fraternal encuentro con la abogada y ex senadora Piedad Córdoba, quien arribó a nuestro país para acompañar la jornada electoral número 25 en tiempos de revolución”, informó el CNE de Venezuela.
Córdoba estuvo junto a Evo Morales en la apertura de las urnas, en la mañana de este domingo, en el centro de votación de la ciudad de Caracas del liceo Fermín Toro. Allí también se presentó como veedor internacional el expresidente de Paraguay Fernando Lugo.
En ese mismo punto se reunieron, según el CNE de Venezuela, otros veedores internacionales provenientes de países como Perú, Guatemala, Colombia, Ecuador, Estados Unidos, Argentina, Bolivia, Rusia, Paraguay y Chile, quienes realizaron un “recorrido de observación en el Liceo Fermín Toro y comprueban el civismo de la fiesta electoral”.
“En Venezuela, vísperas a su jornada electoral, sostuvimos un encuentro con el hermano Canciller Jorge Arreaza y la hermana exsenadora Piedad Córdoba, de Colombia. La tierra del gran Hugo Chávez y del hermano Nicolás Maduro defenderá su proceso revolucionario con el voto”, escribió en Twitter el expresidente boliviano Evo Morales.
Son más de 20 millones de venezolanos quienes se encuentran habilitados para asistir a las urnas este domingo, para elegir a los 277 miembros de la Asamblea Nacional. Algunos han señalado que estos comicios, convocados anticipadamente por Nicolás Maduro, son un intento por tomar un órgano que ha sido esquivo al régimen.
La Asamblea Nacional de Venezuela ha sido representativa de la oposición al oficialismo, incluso hace dos años proclamó a Juan Guaidó como presidente interino del país, por lo que a Maduro le interesa cooptar el poder Legislativo de la nación.
Pese a los veedores internacionales y los anuncios del Ejecutivo sobre la transparencia del proceso electoral, el mundo no está convencido de la legitimidad de los resultados. Países como España y Colombia han anunciado que no reconocerán el resultado.
El presidente colombiano Iván Duque calificó como “remedo de elecciones” los comicios y aseguró que “el deterioro institucional de Venezuela es de las cosas más lamentables que se hayan visto en América Latina”. El mandatario afirmó que no reconocerá los resultados por considerar el gobierno de Maduro, una dictadura.
“Ese dictador, ese sátrapa, tiene montada una opereta, un remedo de elecciones, para quitarle la voz y la expresión al único vestigio que le queda a Venezuela de resistencia democrática, que es la Asamblea Nacional, que hemos reconocido más de 57 Estados en el mundo”, expresó el presidente Duque.
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Aunque aún no se conocen los resultados ni las intenciones de voto previas a la convocatoria, varios analistas y ciudadanos expresan que el resultado es predecible: la victoria del oficialismo.
