¿Se ha preguntado cuánta comida se desperdicia a diario?, pues un estudio de WWF Colombia evidenció que una práctica cotidiana de los colombianos es el desperdicio, principalmente de alimentos mal almacenados y al inadecuado manejo de comida preparada o sobras.
Esta investigación que se hizo en conjunto con el Programa ONU Medio Ambiente y Sancocho BBDO, se realizó en ocho ciudades, Bogotá, Medellín, Bucaramanga, Cali, Barranquilla, Florencia, San José del Guaviare y Leticia, para determinar que la situación es bastante preocupante, pues indicó que, “La manera en la que consumimos y producimos alimentos en el mundo es la principal causa de la transformación de la naturaleza y la pérdida de biodiversidad”.
Camila Cammaert, coordinadora de Sistemas Alimentarios Sostenibles de WWF Colombia, señaló, “al igual que ocurre en otras partes del mundo, los colombianos tenemos una disonancia frente al desperdicio: decimos que no lo hacemos por vergüenza o por considerarlo éticamente incorrecto, pero lo hacemos en la práctica, e incluso nos justificamos cuando ocurre”.
Desperdicios: imaginarios, actitudes y comportamientos en Colombia, es el nombre que tiene el estudio en que se tuvo como enfoque la relación de los alimentos con el cambio climático y la perdida de la biodiversidad.
Fueron alrededor de 1950 encuestas y 47 visitas a hogares en las ciudades de la investigación, donde se pudo evidenciar que los ciudadanos desconocen las consecuencias de esta situación y que incluso piensan que la forma en la que se alimentan no influye de ninguna manera a la crisis ambiental.
La investigación arrojó que el 10% de las emisiones de gases del efecto invernadero, es causante del calentamiento global, pero esto tiene una gran cavidad a la comida que normalmente consumen los colombianos.
En algunos hallazgos se evidenció que esta problemática se maneja aún como tabú, de esta manera se sabe que la abundancia del alimento conlleva al desperdicio. Asimismo, se conoció que los ciudadanos piensan que hay desperdicios más graves que otros. También, que los colombianos desconocen el tratamiento que se le debe dar a los desechos alimenticios, pues solo los arrojan a la basura.
Cammaert explicó que de toda la comida que se produce, se desperdicia el 40% y es por eso que se busca concientizar que esta práctica se debe evitar. "No sólo estamos perdiendo o desperdiciando los alimentos en sí, sino recursos tan valiosos como el agua usada para producirlos. Este informe es un insumo clave para que abramos la discusión y empecemos a medir en cada hogar qué desperdiciamos y por qué. Este es el primer paso para implementar soluciones como cambiar la frecuencia de compra, lograr un mejor almacenamiento o darles un uso más creativo a las sobras”, resaltó Camila Cammaert.
La investigación hace parte de la Iniciativa Producción y Consumo Sostenible, que tiene como principal objetivo aportar a los gobiernos nacional en lo que tiene que ver con el compromiso para mitigar el cambio climático. Además, el Ministerio de Ambiente Alemán es quien financia la investigación por medio de la Iniciativa Internacional para la Protección del Clima (IKI), con WWF Alemania.
