Usar la hoja de coca en la gastronomía fue lo hizo que el nombre de Colombia se escuchara en el Bocuse d’Or a finales de septiembre cuando un grupo de chefs logró un importante reconocimiento gracias al proyecto ‘Coca no cocaína’.
El Bocuse d’Or es uno de los concursos más importantes de la gastronomía a nivel mundial que se realiza cada dos años en la ciudad de Lyon, Francia y en el que participan chefs de todas las cocinas del mundo.
Para este año Colombia fue protagonista no sólo por el talento del equipo sino por su espíritu innovador que dio ejemplo y mostró lo mejor de esta tierra a través de un proyecto que busca rescatar los conocimientos ancestrales de una planta que ha hecho parte de la historia del país por siglos, pero que se ha convertido también en sinónimo de dolor por desconocer su valor y significado.
El galardón que Colombia conquistó con el proyecto ‘Coca no cocaína’ fue el ‘Social Commitment Award’, un premio de compromiso social que se entregó por primera vez y que busca resaltar los impactos en áreas relacionadas con la alimentación.
Esta iniciativa que arrancó en 2019 en la escuela de gastronomía Instituto Gato Dumas Colombia consiguió superar a Tailandia, Nueva Zelanda, Suecia, Hungría, Costa Rica e incluso al país anfitrión Francia. Los jueces evaluaron el grado del impacto social, la temporalidad, la implicación de otros actores y la eficacia de la comunicación.
Junto a la bandera colombiana, el equipo oficial que recibió el premio estuvo liderado por el chef Carlos Pájaro, quien estuvo acompañado por el ‘commis’ Andrés Ahumada; el coach Marcelino Gómez y el presidente Federico Trujillo.
Además, el equipo presentó al jurado un postre en el que se incluyó el mambe (un polvo que se obtiene a base de la hoja de coca), elemento que durante años ha sido estigmatizado a nivel mundial y que termina siendo una planta muy rica en diferentes tipos de nutrientes como: calcio, potasio, proteínas, vitaminas y minerales, este estuvo a cargo de Mónica Ríos, quien es una de las directoras de este proyecto y vocera de esta entrevista para Kienyke.
“Para Colombia este premio significa una oportunidad de cambiar nuestra imagen de país y mostrar un alimento maravilloso como lo es la hoja de coca. Debemos enseñar a más colombianos y extranjeros que no solo se trata de narcotráfico, que al final debemos fijarnos en la coca y no la cocaína, ya que estos proyectos van a impactar desde lo ambiental, social, político y económico”, resaltó la directora de la iniciativa que añadió lo importante que eran estás acciones para aportar a las comunidades herramientas que les ayuden a crecer y desarrollarse.
Por esta razón, el premio que entregó el Bocuse d´Or de 7.500 euros será destinado a apoyar los costos de vida y estudio de Mara Izquierdo, una joven indígena que pertenece a la tribu Arhuaca, y quien tuvo la oportunidad de ganar una beca para estudiar en África.
Así lo señalaron Mónica Ríos y Lupi Herrera: “el proyecto ayuda a construir una reconciliación con las costumbres ancestrales, aportando también a la paz y reconciliación de los colombianos”.
El premio que es patrocinado por Gl-events en asociación con Bocuse d´Or Winners, es otorgado por un jurado compuesto por personalidades internacionales reconocidas por su compromiso y experiencia en este tipo de proyectos que deben trabajar temas de ayuda alimentaria, educación, lucha contra el desperdicio, agricultura responsable, entre otras cosas.
Vea aquí la entrevista completa a Mónica Ríos, directora del proyecto 'Coca no cocaína' y del Laboratorio de Innovación del Instituto de gastronomía Gato Dumas