Quien esté libre de adicciones que tire la primera piedra. Ninguno lo hará, tampoco perderá el tiempo en pensarlo, todos sin excepción, cargamos a cuestas algún tipo de adicción. Somos una sociedad adicta.
Es una adicción masiva por todo tipo de situaciones de la vida actual. Estos comportamientos se convierten en algo habitual y la gente termina por considerar que es algo normal, pues como toda adicción, siempre se niega.
Pero acudamos a la Real Academia Española (RAE) para evitar las discusiones innecesarias, define a la palabra adicción como: “Dependencia del consumo de alguna sustancia o de la práctica de alguna actividad”
De acuerdo con el concepto del experto mundial Gabor Mate, las adicciones en su gran mayoría buscan aliviar algún malestar emocional y que tienen origen en un trauma.
“En casi todos los niveles veo tantas adicciones, tantas compulsiones, y no sólo eso, también veo toda una economía basada en alimentar esas adicciones.” dijo Gabor Mate en una entrevista con la BBC.
Además, agregó que casi nada se escapa: “La adicción se manifiesta en cualquier conducta que una persona encuentre temporalmente placentera o con la que sienta alivio, y por lo tanto siente ansiedad por ella, pero sufre consecuencias negativas como resultado de ésta y no renuncia a ella, o no puede renunciar, a pesar de esas consecuencias negativas.
Concluyó que cualquier actividad que pueda ser adictiva, dependiendo de tu relación a ella. Entonces no es exagerado el titular de la presente columna, estamos en la sociedad de la adicción. No se atrevan a tirar la primera piedra.
Todos somos adictos: Al café, al trabajo, los panes, a la comida, cigarrillo, al celular, videojuegos, redes sociales, sexo, al ejercicio, cannabis, alcohol, cocaína, a la limpieza, al orden, a las compras compulsivas, pornografía, cirugías plásticas, al dinero, a las apuestas, a la perfección, a los dulces, helados y hasta el poder.