No llegó al cargo con maniobras debajo de la mesa. Con proselitismo ordinario, engaños, o padrinazgos de quienes anhelan el poder a toda costa, para dominar con privilegios.
Lo hizo con la paciencia de un monje, aguantando palizas electorales, desplantes, descalificaciones y desprecios de sus colegas de oficio.
Insistió y lo consiguió contra pronósticos, con el beneplácito de quienes entendieron que es la hora de tomar un camino distinto y de darle un viraje a los destinos de la entidad.
Llega sin revanchas. Sin broncas. Con las mejores intenciones, con sentido de unidad.
Carlos Mario es fuerte en su carácter. Decidido en sus propósitos.
Navegó entre restricciones económicas, durante muchos años, con un club de envergadura menor, Equidad, con el que conoció las desventajas de los equipos chicos, aplastados tantas veces por la influencia del poder tras bambalinas, hasta finiquitar su venta a empresarios del exterior.
Formado en las canchas y escritorios, conoce los misterios del futbol a la perfección en el que está hace 25 años
En su cabeza da vueltas la necesidad de la reivindicación del espectáculo, con seriedad y organización en la competencia, para mejorar la imagen interior y exterior del futbol colombiano.
No más aplazamientos de partidos, por ejemplo. Control arbitral sin privilegios. Torneo con 18 equipos, impulso a la categoría C, aprobada en la Federación y la renovación del contrato del VAR, con Mediapro, que se vence a mediados de año.
Abierto a la perspectiva de ingresos superiores a los actuales, que les darán salud y vida financiera autónoma a los clubes, ya estudia con los presidentes de los clubes, el próximo contrato de la TV.
En concordancia con los recaudos del futbol de otros países, especialmente valorados.
En la actualidad son varios los competidores poderosos, con músculo financiero y experiencia en el sector, con proyección en el atractivo y lucrativo negocio. Todos extranjeros.
Los operadores colombianos no han mostrado interés.
Win Sports, sociedad de Torneos y RCN, marcha a la vanguardia de las posibilidades, para revalidar su contrato. Tendrá, y lo sabe, que hacer una gran inversión.
El toro brioso, salvaje, en el que viaja a lomo, en medio de briosos corcoveos, Carlos Mario Zuluaga en la Dimayor. Esteban J.