Hoy por hoy solo se ha hablado de una cosa: El vídeo de Nicolás Gaviria y bueno los labios de mujer de Diego Maradona, pero ese es un tema que prefiero no tocar.
Para quienes no conocen al "joven", que dice ser el sobrino del expresidente César Gaviria, cosa que fue negada por el mismo exmandatario, fue el que protagonizó una bochornosa escena frente a la policía hace un par de noches en la zona T de Bogotá.
Con palabras como "Te vas a morir Malp... y la mas famosa en twitter (mi favorita) #UstedNoSabeQuienSoyYo, han sido la crítica y burla de muchos en las redes sociales. Cuando acciones como esta salen a la luz publica me pongo a pensar, ¿en verdad la clase política o las élites de nuestro país están al mismo nivel que cualquier cristiano en cuanto a cumplimiento de las leyes en general? Es una pregunta muy larga, lo sé, pero si nos sentamos a recordar episodios como el del Senador Merlano y sus "50 mil votos" o del Concejal Martínez, quien protagonizó una persecución de película por toda la caracas y demás episodios que son vergonzosas y tristes (cuando hay victimas mortales de por medio) creo que la respuesta es mas que obvia.
Lo peor del asunto es que nosotros permitimos que personas así administren el país con pensamientos tan arribistas y clasistas (por no leer propuestas al votar), además por el hecho de que se pasan por la faja las normas y leyes, estas mismas personas que solo piensan en que están por encima del otro, son las que se roban recursos públicos, estafan al pueblo y a su mismo pueblo (caso Interbolsa) y que creen que están en la posición permisiva por el hecho de llevar un apellido de prestigio o la cantidad de ceros en su cuenta bancaria, creo que a estas personas, que en su mayoría son quienes hacen las leyes, deberían hacer una repasadita al artículo 13 de la Constitución:
"Todas las personas nacen libres e iguales ante la ley, recibirán la misma protección y trato de las autoridades y gozarán de los mismos derechos, libertades..."
Si las cosas se manejaran tal cual lo dicta la Constitución, no veríamos impunidad en casos como los del joven Salmánca y muchos otros que por pasarse de listos y tener cuentas bancarias gordas pueden pagar sus duras condenas desde la comodidad de sus hogares mientras las sus víctimas atraviesan el dolor y las implicaciones de una pérdida tan abrupta como esta. Siendo así traeré a colación las palabras de mi profesor de sociales del colegio "La ley es para quienes saben manejarla a su antojo" y tiene razón.
Todos queremos una sociedad igualitaria, esto en búsqueda de la paz que todos anhelamos, debemos ser conscientes todos que las leyes deben favorecer y castigar a todo mundo por igual, porque la paz no se logra solo dejando las armas por parte de los grupos guerrilleros, cada uno debe trabajar en ello, haciendo algo tan simple como respetando las normas básicas de comportamiento, porque en mi modo de pensar no es muy distinto el que se cuela en Transmilenio al que le roba plata al país, la "malicia indígena" nos tiene jodidos.