En la mañana de este lunes 20 de septiembre, miembros de CTI capturaron en Barranquilla a Emilio Tapia y a Luis Fernando Duque, representante de la UT Centros poblados, quienes estarían involucrados en el escándalo de corrupción de MinTIC.
Tapia, quien hizo parte del "carrusel de la contratación de Bogotá", disfrutaba del beneficio de casa por cárcel, luego de pagar siete años en La Picota. El excontratista está vinculado al escándalo del contrato de MinTIC y la presunta pérdida del anticipo de los $70 mil millones que giró el Ministerio a la UT.
El CTI también capturó a Juan José Laverde, representante de Rave Agencia de Seguros, empresa encargada de tramitar las garantías señaladas de falsas por el MinTIC.
Así las cosas, esta es la primera acción judicial sobre el proceso que se adelanta por el contrato entre MinTIC y Centros Poblados. De igual forma, hay que señalar que avanzan otras investigaciones en la Procuraduría y Contraloría con el fin de recuperar los $70.000 millones del adelanto.
La relación entre Tapia y las investigaciones del contrato de MinTIC estaría basada en que sería el propietario de ICM Ingenieros, una de las empresas que hace parte de Centros Poblados.
Según reveló W Radio, esta compañía habría sido adquirida por Tapia y otros, dos meses antes de concretar la licitación con el Ministerio que dirigía Karen Abudinen.
"ICM es una empresa que le pertenecía al cuestionado exgobernador de Cundinamarca Álvaro Cruz. Casualmente se le vende a la sombra, dos meses antes de adjudicar este gran contrato, a Emilio Tapia, que empieza a colocar unos nombres rarísimos", denunció la representante Katherine Miranda.
Frente al señalamiento de una supuesta reunión de la exministra de las TIC con Tapia, considerado el 'zar de la contratación', Abudinen afirmó: "El día 18 de noviembre estaba en San Andrés atendiendo la emergencia del huracán con el presidente Iván Duque. Trabajando para conectar este país. Yo no conozco a ese señor ni lo quiero conocer".
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Recientemente, Tapia respondió a las acusaciones que se han hecho en su contra por su presunta relación con el escándalo de corrupción. A través de una carta enviada al diario El Tiempo aseguró que no tiene ninguna relación con los involucrados.
"No es cierto que tenga vínculos familiares o de cualquier tipo con la persona que allí se menciona, como José Fernando Lorduy Fernández. No es mi excuñado, como se indica; de hecho, no conozco a nadie que responda a ese nombre, por lo que mal puede vinculárseme o establecer nexos o relaciones del suscrito con el antes señalado".
Sobre su presunta relación con el empresario, Jorge Molina, señaló que: "Jamás sostuve, directamente o por interpuesta persona, las reuniones con el señor Jorge Molina que allí igualmente se refieren, con el supuesto objeto de ‘mover el tema de las garantías para Centros Poblados’; tampoco que dichos convites, según se indica, hubieran tenido lugar en El Tablazo (Rionegro, Antioquia) y en el restaurante Harry Sasson de Bogotá D.C". }
