Angelino Garzón, líder político indiscutible de Colombia, quien tiene las problemáticas del país grabadas en la mente, no lo pudo describir mejor “…no se trata de un debate entre buenos y malos, sino del tipo de país que queremos construir, de nuestra responsabilidad con los derechos humanos y con la libertad de prensa. Con el respeto a la dignidad y buen nombre de las personas, lo mismo que con su derecho a ser diversas, a pensar diferente y a luchar unidos en la diferencia, por una Colombia justa, incluyente, democrática, respetuosa de los derechos humanos, con cero tolerancia frente a la corrupción, a la violencia y con los que ven al estado como su vaquita lechera”. El exvicepresidente está describiendo en este párrafo el conversatorio ‘La mala hora de las redes sociales’, adelantado por KienyKe.com, ForosK con la alianza de APD.
Garzón era uno de los invitados especiales al evento que se llevará a cabo desde las 8:00 a.m. de este miércoles en Gun Club (Calle 82 # 7 – 77), donde se hablará del poder de la información, puesta en forma de noticias y opinión, falsas o no, que circular a través de las redes sociales y la Internet; aunque por circunstancias ajenas a él no podrá asistir, su pensamiento y posición, expresado por medio de una carta abierta, tendrán eco.
El ex vicepresidente envió una carta a todos los medios y periodistas en la luego de excusar su sentida ausencia, expone, de una manera clara, su punto de vista sobre el tema central del evento, el cual cataloga como “una sana reflexión sobre la responsabilidad democrática de las redes sociales”, reflexiones que para él deben ser extendidas al conjunto de medios de comunicación y de quienes laboran en ellos.
Frente al tema de la responsabilidad social, Garzón asegura que toda persona que tiene la posibilidad y el privilegio de hablar o escribir en las redes sociales o en cualquier medio de comunicación, es un maestro de la cultura ciudadana, que debe saber de antemano que no solamente tiene derechos sino también deberes con quienes reciben dicha información.
Para el líder político, aquel que tiene el privilegio de crear información, puede muy fácilmente, bajo el pretexto de la libertad de prensa, ofender, descalificar, calumniar, promover odios y diferencias, contra otras personas. Hechos que son difíciles de reparar. “Una vez se lanza la flecha, es muy difícil detenerla”, dice Garzón, llevando esta problemática a símiles literarios.
Para el ‘exvice’, en materia comunicacional deben existir siempre unos mínimos, que son: el desarme de la palabra, la defensa de la libertad de prensa, los derechos laborales de los comunicadores sociales y además cero tolerancia con la corrupción, la violencia, el desgreño administrativo, la compra de votos, la aguda desigualdad social y la importancia para el futuro de tener una Colombia democrática, reconciliada y justa.