Carol Ann Figueroa encontró en el Premio Nacional de Periodismo Digital (PNPD) un espacio adecuado para reconocerse y reconocer a los más de cinco mil suscriptores de su canal La Píldora. Al participar y ganar en la categoría “Crítica”, se dio cuenta que halló un lugar justo a la medida de sus ideas y una guía para seguir dando pasos en el camino que considera correcto.
Llegó al premio por la necesidad de ampliar sus horizontes, aumentar sus seguidores, explorar otros temas y conseguir una forma de sostener económicamente su proyecto audiovisual. Después de esculcar en varios sitios web, entró a KienyKe.com y allí identificó una alternativa que hizo “perfecto match” con lo que tenía en mente.
“Cuando leí sobre la convocatoria pensé que era una muy buena opción. Yo no me considero influencer o youtuber, así que me dije a mí misma que era el momento para ser vista como lo que soy y lo que quiero hacer. A través del premio lo logré”, mencionó.
Carol Ann se lanzó al ruedo y aplicó a la convocatoria del PNPD con su video “La cosa política de Natalia París y Vicky Dávila” publicado en La Oreja Roja. En él, hizo una dura crítica hacia la forma en la que en un espacio radial se propició para que la opinión pública le “cayera encima” a la famosa modelo por manifestar su posición política.
Cuando le informaron que fue una de las nominadas sintió una mezcla de emoción e incertidumbre, pues no sabía con qué “pesos pesados” del periodismo y el mundo digital se podía enfrentar. A pesar de eso, tenía claro que el solo hecho de haber quedado entre los primeros seleccionados ya era una ganancia para su carrera.
El mundo le cambió ese 14 de noviembre de 2019, día en que se realizó la ceremonia del Premio Nacional de Periodismo Digital. Cuando escuchó que su trabajo quedó en el primer lugar de la categoría, vio reflejado los resultados de su esfuerzo y dedicación. Se sintió complacida al saber que el jurado encontró en su video una crítica sólida y un producto digital digno de un xilópalo.
El proceso detrás de La Píldora
La Píldora nació de una idea espontánea, de la necesidad de cambiar de aire y probar nuevos formatos. Carol Ann, quien es periodista y cinematógrafa, había trabajado en el mundo del documental, donde los procesos son más largos y le costaron mayor esfuerzo físico, mental y emocional.
El propósito era crear un canal completamente suyo, que tuviera una circulación y un feedback más rápido. Quería hablar sobre cómo se aborda el tema de la mujer en los medios, pues ese análisis siempre le ha llamado la atención. Con el tiempo enriqueció las publicaciones con otros temas como las cuestiones políticas y sociales.
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El primer año, arrancó subiendo pequeños videos a YouTube de manera mensual y después le apostó a montar los contenidos cada 15 días. Confesó que al principio “no le metió mucho la ficha”, pero que, por un amigo que ama el canal y “estaba desesperado por su falta de compromiso”, comenzó a darle promoción a los videos en Twitter, a generar piezas gráficas y a definir su propia identidad.
Para ella, La Píldora es una “terapia de choque” que tiene 40 % de ira, 30 % de humor y 30 % de indignación. “Yo siempre he pensado que lo que trato en La Píldora es como una enfermedad. Pues hablo principalmente de los temas que más nos agobian como sociedad”, expresó.
Han pasado más de tres años y La Píldora está a la par de grandes contenidos de Internet como La Pulla o Las Igualadas. La cantidad de seguidores que tiene hoy en día la han obligado a dedicarle más tiempo, y a convertirse también en diseñadora gráfica y “hasta en community manager”.
Cuando una idea se le mete en la cabeza siente la necesidad de materializarla en una nueva publicación. Pasa más de ocho horas analizando el tema, buscando los archivos y armando el guión, trabajo que se convierte en diez minutos de video de crítica pura y dura.
“También me fijo mucho en los comentarios y les saco provecho para no dejar el debate atrás. Siempre hay retroalimentación que me sirve para nuevas píldoras”, indicó.
Al final de esta entrevista, Carol Ann manifestó que lo que más valora del Premio Nacional de Periodismo Digital es que este le reafirmó que su canal es bueno y que va por buen camino para hacer siempre cosas diferentes.
Además, aseguró que en él encontró un lugar en el cual encajar “todo lo que ha estado inventando” y el que le ayudó a darse cuenta cuál era el significado y el fruto de tantas horas de trabajo.
“El premio permite diversificar la mirada sobre el periodismo y los contenidos. Allí encontré que lo escrito, audiovisual, digital y todas las prácticas a las que yo les he apostado tienen un lugar. Me dio el impulso que necesitaba para seguir haciendo videos y reflexionar sobre cómo mejorarlos”, manifestó.
¿Cómo postularse?
La fecha máxima para postular los trabajos será hasta el 31 de mayo del 2020 y lo podrá hacer en la página oficial: www.premioperiodismodigital.com.
La ceremonia de premiación se llevará a cabo el 22 de octubre en el desarrollo de la tercera edición del Festival de los Sentidos de KienyKe.com, una jornada académica que resalta todas las potencialidades de la industria digital, el periodismo y las nuevas formas de contar historias.